De nuevo la declaración de varios testigos fue clave para que la Policía Local de Pontevedra llevase a cabo un arresto por un presunto caso de violencia sobre la mujer. Además, se da la circunstancia en este caso en el que la víctima es una adolescente, menor de edad.

Según explicaron fuentes de la Jefatura local, el pasado 27 de marzo sobre las 12.40 horas se recibió una llamada telefónica en la centralita de comunicaciones de la Policía Local (la sala del 092) en la que se alertaba de la presencia de un joven que estaba golpeando a una chica en el paseo del río de Os Gafos.

Desplazadas varias patrullas al lugar, los dos jóvenes fueron localizados cerca de una vivienda abandonada en el paseo fluvial, antes mencionado. En un primer momento, la pareja, que reconocen que son novios, negó los hechos, manifestando que se trataba de una disputa entre ambos pero sin que mediara ningún tipo de agresión. No obstante, los agentes pudieron recoger las declaraciones de varios testigos que presenciaron las agresiones por parte de este joven al punto de que este llegó a encararse con una de las personas que presenciara los ocurrido. Al parecer, esta persona intentó mediar para detener la agresión y un joven le manifestó "que se metiera en su vida", según fuentes policiales.

Ante estos hechos, los agentes municipales procedieron a la detención del joven, que tiene 19 años de edad, mientras que la mujer, menor de edad, fue trasladada al domicilio paterno.

Los datos facilitados por la Fiscalía de Menores ya alertaron en los últimos años del incremento de los comportamientos machistas entre los más jóvenes. Con todo, según los datos del Consejo General del Poder Judicial, de todos los casos de violencia de género tramitados en los partidos judiciales de Marín, Pontevedra y Caldas tan solo una de las víctimas era una menor, en el partido judicial de Marín.

Las estadísticas señalan también el escaso número de denuncias por casos de malos tratos que llegan al juzgado por alertas de terceras personas. La mayoría de las denuncias se presentan por la víctima y una vez que ya ha sido necesaria la intervención policial.