El PSOE recomienda a Lores que desista de la planta de compost "ante el abandono de Louzán"

El "consejo" del presidente de la Diputación y del PP provincial, Rafael Louzán, a la alcaldesa de Marín María Ramallo de que su municipio no se sume a la planta de compostaje de Canicouva por si le "toca pagar algo" ha sido interpretado por el PSOE pontevedrés como un claro "aviso" de que este proyecto de reciclaje de materia orgánica "es una ocurrencia de Lores en la que acaba de quedar tirado por Louzán" por lo que el concejal socialista y candidato a la Alcaldía, Agustín Fernández, aconseja al regidor Miguel Fernández Lores, que desista definitivamente del plan.

"Louzán deja tirado a Lores, en la cuneta y después de embarcarlo en esta aventura, lo abandona al primer problema", sostiene Fernández, que cree que la mejor salida ahora para el BNG es abandonar una "ocurrencia" que surgió de un protocolo firmado en mayo pasado entre Lores y Louzán. Este último no solo aconseja a Marín que se desmarque del asunto, sino que emplazó también al Concello a buscar otro terreno por el rechazo vecinal surgido en parroquias limítrofes a Canicouva.

Ante estas "bajas", el PSOE, que siempre se opuso abiertamente a la iniciativa, subrayó ayer que "si el BNG pretende seguir adelante, los pontevedreses deben saber que nos va a costar dinero, tanto para ejecutar la planta por parte del Concello, ante la marcha de la Diputación, que son entre 15 y 20 millones de euros, como del mantenimiento posterior, que serán constantes pérdidas anuales".

La otra opción posible, a ojos de Agustín Fernández, es que Pontevedra "caiga en brazos de la Xunta para hacer esta obra y ya sabemos qué supondría eso, que se confirmaría que en Canicouva se haría la Sogama del Sur, de ahí que insiste en pedir el BNG que renuncie al proyecto.

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