La agresión a un jugador del Beluso en Marín se salda con una multa para el autor confeso de los hechos
Sustituye 9 meses de prisión por el pago de 1.620 euros - La víctima había acabado en el hospital

André Suárez, la víctima, en 2010 en el Hospital Domínguez. // R. V.
CARLOS GARCÍA | PONTEVEDRA
Una multa de 1.620 euros. Este es el castigo para un aficionado de la S. D. Santomé, de Marín, por la agresión que sufrió en marzo de 2010 el entonces jugador del Beluso, André Suárez, que acabó en el hospital con la mandíbula rota. Esta es la condena que aceptó el autor de los hechos, José Manuel B. S., en el juicio que ayer se celebró en Penal 1 de Pontevedra. En realidad, José Manuel B. S. aceptó una pena de 9 meses de prisión que será sustituida por esta multa de 18 meses a razón de tres euros al día. No obstante, el magistrado advirtió claramente al acusado que, de no hacer frente a la sanción, debería cumplir la pena privativa de libertad.
José Manuel no era el único acusado que se sentaba en el banquillo. Otras dos personas lo acompañaban pero ambos resultarán absueltas una vez que el fiscal y la acusación particular retiraron todos los cargos que pesaban contra ellos al inicio del juicio.
El fiscal solicitaba inicialmente una pena de 3 años y nueve meses de cárcel para cada uno por un delito de lesiones. El reconocimiento de los hechos por parte del acusado permitió rebajar sensiblemente la pena impuesta, además de aplicar las circunstancias atenuantes de dilaciones indebidas (el incidente se produjo hace ya cuatro años) y reparación del daño, puesto que antes de que se llegase a la celebración de esta vista oral, el acusado ya había hecho frente a las indemnizaciones que se le reclamaban por estos hechos. Eso sí, se le aplicó la agravante de reincidencia, dado que en 2009 ya había sido condenado por un delito de lesiones, de ahí que el magistrado le advirtiese de que, de no abonar la multa, acabaría en prisión.
La vista oral se retomaba ayer después de una sesión inicial en la que los tres acusados habían negado los hechos pero la ausencia de varios testigos había obligado a suspender el juicio.
Fractura de mandíbula
Según se publicó entonces, aquel 21 de marzo de 2010 André Suárez, que entonces tenía tan solo 19 años edad, se dirigía hacia los vestuarios tras finalizar el partido entre el Santomé y el Beluso, correspondiente a la liga de Tercera Regional. En ese momento se produjo un tumulto que se trasladó de las gradas al terreno de juego y allí resultó agredido siendo pateado en la cara.
Como consecuencia de esta agresión, André perdió el conocimiento y tuvo que ser trasladado al Hospital Domínguez de Pontevedra en donde permaneció varios días ingresados tras serle diagnosticada una fractura de mandíbula, entre otras lesiones.
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