Me llama un amigo por teléfono para advertirme de un nuevo timo que llega indiscriminadamente a los correos electrónicos de la gente de buena voluntad que, de entrada, se encuentran con una magnífica noticia y es que Hacienda le comunica que han encontrado un fallo en su declaración dela renta, ¡oh sorpresa! a su favor , con lo que le van a devolver 405,73 euros. Asegura mi amigo que el corazón le dio un vuelco de alegría y cuando ya se prometía una buena cena con su mujer, se le ocurrió pensar si sería un timo. Su desconfianza le aconsejó llamar a Hacienda para asegurarse de que le había tocado aquella lotería y ¡oh sorpresa! otra vez, su gozo en un pozo, porque le dijeron que ya habían recibido más llamadas parecidas y que no había tal deseo del departamento recaudatorio de devolver ni un céntimo porque tampoco había razón para ello. Como buen amigo me llama y también a otros como yo para decirnos que no nos creamos el bulo. Suerte porque el pasado jueves me iban a devolver 527,80 euros.