La carretera de Cruz de Maceira, en dirección al Lago de Castiñeiras, reparada hace un año con fondos de la Diputación Provincial, se encuentra en un estado "penoso", lleno de baches, piedras y con el sendero para ciclistas y peatones destruído en algunas zonas.

Esta vía fue reparada hace un año por la Diputación de Pontevedra y las obras, solicitadas por la Comunidad de montes de Santomé, consistieron en la reparación de los baches y en el asfaltado de la calzada. Asimismo, se construyó un camino de gravilla para senderistas y ciclistas.

En la actualidad, el sendero "está muy deteriorado y en algunas zonas ya se vino abajo" explica Daniel Rosales, presidente de la asociación comunera. Añade, además, que "se gastó el dinero y no se consiguió nada", refiriéndose a la rápida degradación del pavimento y del paseo. Al mismo tiempo, el comunero Rosales se mostró muy descontento con la calidad de los trabajos, "la carretera se dejó bonita para 15 días" , afirmó.

Entre las posibles causas que provocaron el deterioro de la vía, el presidente de la Comunidad de montes de Santomé considera que la lluvia y el elevado número de vehículos que transitan la carretera en dirección al Lago de Castiñeiras, Moaña o el centro urbano marinense causaron la degtradación. Aunque la principal razón del actual estado del firme es, según Daniel Rosales, la baja calidad de los trabajos. "No fue una buena obra, queríamos que se le diera un lavado de cara a la carretera y solo duró dos semanas" alega el comunero.

El actual estado del vial no garantiza la seguridad de los vehículos ni de los deportistas, tanto senderistas como ciclistas, debido a los grandes baches del asfalto y a los posibles derrumbes de la sensa situada al margen de la calzada, que se vino abajo en algunos tramos de la vía. Por otra parte el asfalto está fragmentándose en los límites laterales de la carretera a causa del tránsito de coches, que al coincidir dos turismos en sentidos contrario, deben arrimarse a los lados de la carretera y el asfalto, al ser más fino, se rompe.

Caballos en la carretera

En los últimos días, fueron avistados varios caballos salvajes caminando por la carretera de la localidad de Cruz de Maceira, a la altura del cruce hacia el Lago de Castiñeiras. Los equinos pasan de una zona boscosa a otra cruzando la carretera en un cambio de rasante y los vecinos están preocupados por el peligro que esto supone.

Desde la Comunidad de Montes de Santomé, se pide a las autoridades que intensifiquen los controles y sancionen a los propietarios de las reses que no tengan microchip. Asimismo alegan que se construyeron varios pastizales en terrenos comunales para que estos animales pasten. Sin embargo, estos recintos no son utilizados por los animales que campan a sus anchas por el bosque comunal.