El Ministerio de Fomento ha descartado definitivamente el soterramiento de la línea del tren entre Pontevedra y el puerto de Marín a su paso por la plaza de Placeres a la hora de dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que declaraba ilegales los tres pasos a nivel ubicados en dicha plaza.

Fomento remitió al Concello de Pontevedra para su exposición pública el proyecto definitivo por el que apuesta eliminar los polémicos pasos a nivel. En líneas generales, se trata del mismo proyecto datado en mayo de 2011 y que mantiene el paso del tren en superficie por la plaza, a la vez que se plantea construcción de dos pasos subterráneos para peatones y turismos a través de dos viales que conectan la zona de O Cabo con la avenida Montero Ríos (la carretera vieja de Marín). La plaza de Placeres queda definitivamente dividida en dos por la línea ferroviaria ya que una barrera vegetal se prolonga entre los dos pasos subterráneos.

El documento llegó el martes a las oficinas municipales coincidiendo con la publicación hoy en el Boletín Oficial de la Provincia del anuncio de la Secretaría de Estado de Infraestructuras por el que se somete a información pública. Una vez que se publique en el resto de boletines oficiales, los particulares, colectivos e instituciones interesados podrán formular alegaciones en el plazo de un mes.

Dos zonas de obra

La intervención que plantea Fomento se divide en dos actuaciones principales que se corresponden con la supresión de los dos pasos a nivel para peatones y vehículos que actualmente se encuentran situados en la calle Areal y en la Rúa da Praia. El proyecto contempla la eliminación del paso a nivel de la calle Areal, cegando este vial en la zona de vías y cerrándolo con la mencionada barrera vegetal. También se eliminaría el paso a nivel peatonal existente en la plaza. En sustitución de estos dos pasos a nivel se crearía un túnel subterráneo que estaría compuesto por un vial de 117 metros de longitud que se desplaza a la derecha de la actual calle Arenal y que partiendo de la Avenida de Montero Ríos descendería hasta cruzar por debajo de la vía del tren para desembocar finalmente entre el campo de fútbol y la cancha de fútbol sala de Placeres.

Una de las características de este primer paso subterráneo es que Fomento reconoce que no podría ser utilizado por todo tipo de vehículos ya que "se obtiene un gálibo vertical libre en el punto más desfavorable de 4 metros, que resulta insuficiente para el paso de autobuses, pero sí permite el tránsito de turismos y camiones de gálibo reducido". Este paso contará con una rampa para peatones.

La segunda actuación importante se centraría en el entorno de la rúa da Praia. La eliminación del paso a nivel en este punto se realizaría mediante la construcción de un segundo paso subterráneo cuya construcción va a obligar a reordenar el sistema viario de la zona y a trasladar hacia Marín la actual glorieta de la Avenida de Montero Ríos. Toda esta reordenación viene dada por la necesidad de dotar a este paso subterráneo de la Rúa da Praia de un gálibo mínimo de 4,5 metros para posibilitar la circulación de autobuses escolares al colegio Sagrado Corazón y camiones al resto de edificios existentes en la zona de O Cabo. También se ampliará un camino vecinal que parte de la glorieta.

Para el cerramiento de la línea de ferrocarril a su paso por la plaza se propone colocar "una barrera vegetal entre los dos pasos inferiores formada por arbustos de tal forma que se impida el paso sin afectar a la visibilidad de la plaza". Desde el Concello creen que de esta forma se hace más evidente la ocupación de la plaza por parte de la línea de ferrocarril.

Coste de la actuación

El Concello de Pontevedra, a través del edil de Ordenación do Territorio del Concello de Pontevedra, César Mosquera, desveló ayer algunos de los detalles de este proyecto, incluido, por ejemplo, su coste. Según Mosquera, el documento recoge un presupuesto de ejecución material de la obra de unos 6,5 millones de euros. Sumándole impuestos y otros costes adicionales el montante total de la actuación rondaría los diez millones de euros.

La decisión de Fomento promete traer polémica ya que el Concello ya anunció ayer que presentará alegaciones aunque no indicó en qué consistirán hasta estudiar a fondo el proyecto. Los vecinos insistieron una vez más en que los tribunales no darán por cumplida la sentencia hasta que se retiren las vías de la plaza o el tren circule soterrado.