Las intensas precipitaciones acompañadas de aparato eléctrico también dejaron un reguero de averías en Poio. En este municipio un rayo que cayó sobre la una de la tarde fundió los fusibles de alta tensión de la avenida de San Xoán y dejó sin luz a esta zona. A última hora de la tarde los daños todavía no habían sido reparados. Esta avería también afectó a las zonas de San Xoán y A Seara.
Asimismo, la tormenta también provocó diversos problemas en el alumbrado público en los barrios de A Caeira, A Barca y A Seara. Desde el colegio de Chancelas y la casa rosada se reportaron problemas a causa de las descargas eléctricas. En distintos comercios y viviendas de San Xoán también estaban a la espera de que retornase la luz para conocer si los rayos habían dañado aparatos eléctricos que temían que pudieran haberse estropeado a consecuencia de las fuertes descargas. Lo mismo ocurría en A Caeira, muy cerca de la parroquia pontevedresa de Campañó, en donde otro rayo produjo importantes daños.
En Combarro, el viento también se llevó por delante los carteles instalados por la asociación de comerciantes. Tres brigadas municipales estuvieron recorriendo el municipio durante toda la jornada para reparar los daños que fueran de su competencia.
Marín y Sanxenxo
El fuerte temporal también dejó pequeños desperfectos en Sanxenxo, como una antena que se cayó sobre un vehículo en el calle Luis Vidal Rocha, un árbol seco que se vino abajo en la carretera en Carballal, Bordóns; un caño de agua caído en Panadeira, una hamaca que se cayó desde una azotea en Portonovo y un cartel que se desprendió de un hotel en A Vichona. Una brigada del departamento de Servicios Generales estuvo de guardia para subsanar los desperfectos, junto a los efectivos del Servizo de Emerxencias y la Policía Local que se mantuvieron en alerta, explicaron fuentes municipales.
La mayor parte de la flota de Portonovo se mantuvo amarrada. La previsión es que esta situación se mantenga hoy debido a que continúa activa la alerta en la costa, salvo en el caso de un grupo reducido de embarcaciones que trabajan al abrigo de la ría.
En Marín también se produjeron cortes en el suminstro eléctrico en la Avenida de Ourense, que resultó anegada sobre las dos de la tarde. El edificio judicial sufrió goteras.
En la comarca del Umia y en Cotobade también marchó la luz. En cualquier caso, es reseñable que las rachas de viento llegaron a alcanzar los 113 kilómetros por hora en la estación meteorológica del monte Xesteiras en Cuntis. Allí, la precipitación acumulada fue de 29 litros por metro cuadrado.
