El sur de Galicia se consolida como potencia termal. No sólo en lo que respecta a la oferta (más de 300 manantiales catalogados con alrededor de 2.500 plazas en alojamientos adscritos) sino también a la demanda, como prueba que los balnearios pontevedreses llegaron a alcanzar durante el pasado puente de la Constitución el 98% de ocupación, según datos del Observatorio de Turismo Rías Baixas-Diputación de Pontevedra.

Éste constata que con los Paradores estos establecimientos de salud y/o belleza constituyen la oferta más demandada en el mes de diciembre.

En toda la provincia de Pontevedra la ocupación media se situó en un 66,8%, a muy larga distancia del 80% en todo el estado contabilizado por el Instituto de Turismo de España. En este escenario el turismo de salud y belleza despunta como un valor en alza: fue el alojamiento preferido durante el fin de semana (cuando se registró el 98%) y no bajó del 85% de demanda de pernoctaciones durante el resto del puente, unas jornadas"pasadas por agua" en las que localidades como Sanxenxo o Baiona superaban dificilmente el 55%.

Un año más, predomina el turista de proximidad y se repite el perfil mayoritario: procede de Madrid o de Galicia, tiene entre 35 y 45 años, viaja en familia, declara que acude a las Rías Baixas para conocer su paisaje y "para descansar" y viaja en su propio vehículo.

Esta disponibilidad de transporte propio (más del 70% de los turistas que visitan las Rías Baixas en el último trimestre del año declara utilizar su coche para llegar hasta Galicia) refuerza otra de las tendencias de los últimos años: las reservas a última hora para descartar un destino en función de la meteorología, un factor que en este 2009 ha actuado decididamente en contra del sector turístico del norte de España.

Un 20% madrileños

Menos del 10% de los turistas que visitan las Rías Baixas en el último trimestre del año es extranjero. La mayoría es español: los madrileños copan más del 20% de las reservas, seguidos de los gallegos (alrededor de un 17%) y los castellano manchegos (con aproximadamente un 7% de las pernoctaciones contabilizadas).

Y si en la costa los balnearios constituyen el principal reclamo, los que se decantaron por el interior de la provincia destacan a mayores "el turismo gastronómico como reclamo", señalan los portavoces del Observatorio Rías Baixas.

Éste considera que la ocupación media de la provincia durante el pasado puente en general ha sido "razonable" y destaca una vez más el caso de Sanxenxo, que registró la mayor demanda, entre el 65 y el 70% según los días.

Por su parte, Vigo cerró el periodo turístico con una ocupación del 56% y Baiona del 55%.

Y si los balnearios representan la fórmula de más éxito, los establecimientos de turismo rural ocupan en este final de 2009 el espacio opuesto. "Las cifras no han sido tan buenas como se esperaban", reconocen los técnicos del observatorio, que constatan en su informe que durante el fin de semana la demanda de pernoctaciones llegó al 60%, el pico máximo de las mini vacaciones, pero no superó el 40% en el resto del puente.

En cualquier caso, el observatorio recuerda que "no todos los establecimientos de la provincia de Pontevedra mantuvieron abiertas sus puertas durante el puente", por lo que resulta más dificultoso aproximarse a las cifras reales de ocupación.