Los vecinos de Vilaboa afectados por el proyecto de reforma de la carretera N-554 acordaron ayer en asamblea dar unos días de plazo al Ministerio de Fomento para que les aporte una completa información acerca del vial y, en caso de que no cumpla con su cometido, emprender acciones de protesta para hacer valer sus derechos. Entre las movilizaciones que barajan se encuentra la paralización de las obras una vez que las máquinas empiecen a trabajar.

Un centenar de personas acudieron a la asamblea celebrada en la tarde de ayer en la Casa de Montes de Santa Cristina de Cobres para debatir sobre el proyecto de reforma de la N-554 que va a Rande y de las demandas planteadas al Ministerio de Fomento. A la reunión acudió el alcalde de Vilaboa, José Luis Poceiro, quien manifestó a los asistentes que en breve Carreteras dará a conocer el proyecto de mejora de este vial.

Los vecinos han recibido estos días las primeras notificaciones para comparecer en el pago de depósitos previos de esta carretera, de ahí que hayan decidido reunirse para estudiar la situación. Según explicó uno de los afectados, en principio, confiaban en que antes de iniciar las obras Fomento se pondría en contacto con ellos para explicarles el proyecto y, de esta forma, conocer si eran atendidas las demandas vecinales sobre el trazado. Sin embargo, ya se recibieron notificaciones y esta información no ha llegado, de ahí que estén estudiando protestas.

La reunión transcurrió con total normalidad y se puso de manifiesto que la práctica totalidad de los vecinos de Vilaboa están unidos y en buena sintonía con las gestiones que se están llevando a cabo desde el ayuntamiento para reivindicar una carretera moderna, que respete el traslado antiguo y garantice todos los accesos a industrias y viviendas e incluya buena señalización vertical horizontal y luminosa. Según aseguran, no están en contra de la carretera pero no quieren una autovía y acordaron volver a reunirse a finales de mes para estudiar de nuevo la situación.

Los vecinos denuncian que gratuidad de Rande ha provocado un considerable incremento del tráfico de vehículos por el vial, que se quintuplicó en el caso de vehículos pesados y triplicó en los ligeros. Además, aseguran que el 72 por ciento de los vehículos que la usan son de tránsito, no se quedan en Vilaboa.