La ausencia de un testigo, considerado ?esencial? por la demandante, obligó ayer a suspender la vista oral de un caso de despido ?por falar en galego? que se iba a celebrar en el Juzgado de lo Social número 2 de Pontevedra. La juez fijó la nueva vista para el próximo 12 de julio e instó a la acusación a reducir de dieciséis a cinco sus testigos con el fin de evitar reiteraciones innecesarias.

Montserrat Irago estuvo ayer acompañada, entre otros, por el alcalde de Pontevedra, Miguel Fernández Lores; la parlamentaria del Bloque Carmen da Silva y el presidente del Mesa pola Normalización Lingüística, Carlos Callón, quienes quisieron expresar su solidaridad con la trabajadora demandante, su rechazo a la discriminación por razón de idioma y su apuesta por el uso del gallego en todos los ámbitos.

De acuerdo con la demanda presentada, Montserrat fue despedida a los siete días de empezar a trabajar tras supuestamente ser recriminada por la dueña de la asesoría en donde fue contratada por hablar en gallego y por su forma de vestir. ?Díxome que non podía falar en galego cos compañeiros nin cos clientes e que tiña que vestir saia ou pantalón con chaqueta e maquillarme?.

Ante esta situación, decidió recurrir al juzgado en busca, no de dinero, sino de una sentencia ejemplarizante.?Non quero un peso desa señora, a dignidade non se paga con diñeiro, nin o estrés, o deixar de comer ou de dormir. Non me arrastrarei por cartos. Que un xuiz diga que non hai dereito a isto, a que che digan: Ya te dije que aquí no se habla gallego?, explicaba ayer Montserrat Irago momentos antes de iniciarse la vista, finalmente aplazada.

Recuerda esta trabajadora que tiene una experiencia laboral de nueve años, hablando en gallego.

Por su parte, desde la asesoría denunciada se declinó hacer ningun tipo de comentario.

También el alcalde de Pontevedra, Fernández Lores, aludió al hecho de que todavía hoy en día se trate de vetar el uso del gallego. ?É un feito lamentable, denunciabel e máis a estas alturas do século XXI? afirmaba ayer el alcalde pontevedrés para quien este asunto ?é un tema político, que atenta contra os dereitos do idioma e dos nados en Galicia?.

?A miña función como alcalde é tamén defender a língua e espero unha resolución xudicial que sexa exemplarizante? añadió Fernández Lores.