El anillo da Eiriña y Fernández Ladreda serán los ejes básicos del tráfico urbano

Apenas un día después que la comisión de Urbanismo aprobara las bases para contratar la redacción de un plan de movilidad y tráfico en toda la ciudad, los técnicos municipales, que coordinarán ese informe, ya disponen de algunas posibles medidas. La más llamativa establece que el anillo da Eiriña (formado por las calles 12 de Novembro y José Malvar) y la avenida de Fernández Ladreda constituirán los ejes principales de circulación de la ciudad.

Ambas calles se convertirán en los distribuidores primarios de circulación dentro del casco urbano, apoyados en otros viales de segundo nivel, como Eduardo Pondal, avenida de Vigo o Reina Victoria, entre otros.

La pretensión para el anillo de A Eiriña y Fernández Ladreda es conseguir que reciban el mayor tráfico posible de la ciudad pero también que sean capaces de despacharlo sin atascos. Para ello, se plantean medidas en las calles que desembocan en ambos viales, como direcciones únicas o cambios de sentido.

De hecho, salvo los viales citados, la intención es ir aplicando la dirección única en la mayor parte del callejero urbano. Incluso en Beiramar, el objetivo es atenuar todo lo posible el tráfico, y recortar el número de carriles, dejando previsiblemente uno en cada sentido de la circulación.

No obstante, ninguna de estas medidas se considera definitiva hasta disponer del estudio de tráfico cuya redacción se aprobó el pasado miércoles en la comisión de Urbanismo.

Su concejal, César Mosquera, insistió ayer en que "no se trata de que una empresa venga aquí y quiera aplicar sus criterios. Esos criterios ya están perfilados por los técnicos municipales desde hace tiempo y la intención es mantenerlos", de ahí que ya estén sobre la mesa algunas de las medidas que se pretende aplicar en el futuro.

En todo caso, todo dependerá también de la red viaria exterior que otras administraciones están dispuestas a ejecutar, como la variante de Marín por Lourizán, la ronda interior, la circunvalación, los accesos a Montecelo y Monte Porreiro y el proyectado puente sobre el río Lérez a la altura del puerto deportivo.