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La facultad se convierte en Parlamento

Los exparlamentarios Noela Blanco y Roberto Castro se acercaron ala Facultad de Derecho de Ourense para impartir una charla-coloquio sobre la importancia de la democracia, que se acabó convirtiendo en un amplio debate sobre rural o inmigración.

El alumnado asistente a la charla-coloquio. |  Fotos: Iñaki Osorio

El alumnado asistente a la charla-coloquio. | Fotos: Iñaki Osorio

Ourense

No son pocos los comentarios que la mayoría de jóvenes hacen sobre sus posturas ideológicas, su conocimiento del sistema político o la solidez de sus argumentos a la hora de hablar sobre problemáticas sociales. Pero si algo demostraron ayer los alumnos del grado de Derecho en el campus de Ourense es que su interés en la política puede ser mejor o peor valorado, mas cosas que decir, tienen.

Este barullo de ideas se llevó a la Facultad de Derecho de la UVigo en la ciudad de As Burgas gracias al programa Charlas-coloquio sobre el Parlamento de Galicia. La actividad, que se organiza desde 2011 con la colaboración de la Asociación de Exparlamentarios/as, tiene como objetivo difundir los valores de la democracia entre la gente joven. Para ello, tres antiguos diputados acuden al centro educativo que lo solicite para hablar de sus experiencias y responder las preguntas que tenga el alumnado. Ayer fue el turno de la socialista Noela Blanco y el popular Roberto Castro, a los que debía acompañar la miembro del Bloque María Tereixa Paz, que no pudo asistir por indisposición. Todos fueron llamados por el profesor de Derecho Constitucional José Agustín González Ares, quien comentó que las charlas suelen acudir al campus termal «tres ou catros veces ao ano».

Los exdiputados, junto a otras autoridades.

Los exdiputados, junto a otras autoridades.

Pese a unas inconveniencias tempranas con las nuevas tecnologías, la charla acabó siendo un éxito de participación e intercambio de ideas. Antes de comenzar la ronda de debate, Noela quiso enfocar su intervención en la necesidad de conocer más a fondo la actividad que se lleva a cabo en el Parlamento y participar en la actividad política: «Creo que é importante que os estudantes lle poñan cara aos seus representantes para poder petar nesas portas cando teñan que reclamar algunha cuestión, e tamén para a rendición de contas, algo fundamental». Castro también quiso incidir en la necesidad de tomar papel en la actualidad que se lleva a cabo en la rúa do Hórreo, la «máxima representación da Comunidade Autónoma,e que debe recoller as inquedanzas dos cidadáns a través dos diferentes partidos políticos». Eso sí, el que fue diputado durante cinco legislaturas afeó el sistema plenario actual y la gran influencia de sus grupos a la hora de las votaciones: «Agora que estou fóra da actividade política, doume conta de que ninguén ten nunca a razón absoluta, e de que acertados estaban algúns deputados na oposición. Pero ao formar parte dun grupo, estás máis limitado á hora de expoñer as túas ideas».

Gran actividad de debate

Pero si en algo destacó el evento fue en la ronda de preguntas, que, de hecho, alargó los 60 minutos habituales de duración de las charlas-coloquio a más de dos horas que no fueron interrumpidas por falta de cuestiones, sino por falta de tiempo. Un alumno comenzó con una pregunta sobre la despoblación del mundo rural, pero ese solo fue el comienzo para dar rienda suelta a cuestiones como el control de la inmigración, la defensa propia ante el allanamiento de morada o incluso la soberanía del Sáhara Occidental. Un sinfín de temas, y también de opiniones, que los exdiputados manejaron con gran soltura: frente a la falta de información o divulgación de bulos que profesaban algunos de los estudiantes, Blanco y Castro dejaron la habitual crítica atrás y respondieron a lo planteado con datos y el mensaje de que cualquier problemática social se puede resolver con voluntad política.

Solo el tiempo dirá si en esa charla-coloquio estuvo algún futuro diputado del Parlamento de Galicia, o quién sabe si el mismísimo presidente de la Xunta, pues, al fin y al cabo, tanto Rueda como Feijoó se licenciaron en Derecho.

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