Un camionero que quintuplicaba la alcoholemia se fue a comer churrasco para que le bajase la tasa

Una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico de Verín fue requerida este domingo, sobre las 20.50 horas de la tarde, para auxiliar, por el reventón de un neumático, al conductor de un vehículo articulado que circulaba por la A-52, a la altura de ese municipio ourensano, con un transporte de 24 toneladas de mercancías, desde O Carballiño a Alcalá de Henares (Madrid). Los agentes notaron que el chófer desprendía un fuerte olor a alcohol, por lo que le efectuaron las pruebas. Dio sendas tasas de 0,77 y 0,76 mg/l, quintuplicando el nivel máximo permitido para los conductores profesionales, que es de 0,15 mg.

El infractor está investigado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, por conducir con una tasa de alcohol superior a 0,60 mg/l de aire espirado. El camión quedó inmovilizado en el lugar de la detección hasta la desaparición de las causas en su conductor. Según la Guardia Civil, el transportista manifestó que se iba a un establecimiento cercano a cenar un churrasco, y a esperar a que le pasase la sintomatología.

El Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ourense recuerda la incompatibilidad del consumo de alcohol y drogas con la conducción. Alerta sobre todo del peligro entre los conductores profesionales, "cuyos vehículos de grandes dimensiones pueden ocasionar graves consecuencias en caso de un siniestro vial", subraya la Guardia Civil

"Estos consumos de alcohol y otras sustancias estupefacientes influyen en el conductor del vehículo con la disminución de la capacidad sensorial, de reflejos y de atención en la conducción, desvirtuando la percepción de la realidad y creando un concreto peligro para la vida propia y la del resto", advierten las autoridades.