“La Carta Europea de la seguridad vial es la mayor plataforma de seguridad vial dirigida a la sociedad, que tiene como meta reducir el número de muertes y lesiones graves en las carreteras todos los años”, explica Marila Murciano, miembro de la Fundación Mapfre, la entidad que sin animo de lucro que trabaja como enlace nacional de esta iniciativa, pues es la Comisión Europea la impulsora de este documento. A día de hoy, la carta cuenta ya con más de 1.000 miembros que representan a empresas, asociaciones, administraciones públicas, instituciones de investigación, universidades, escuelas y ONGs.
Uno de los últimos miembros en sumarse a esta iniciativa fue la Diócesis de Ourense, la primera de toda Europa en dar este paso. La firma tuvo lugar ayer en el Obispado de Ourense en un acto al que acudieron también autoridades, instituciones y sacerdotes. El obispo, José Leonardo Lemos fue el encargado de firmar junto con Marila Murciano, y tras esta acción destacó que “nos hemos adherido porque somos conscientes como Iglesia que debemos implicarnos en esas buenas prácticas”. Además, durante su intervención aseguró que era una buena opción para “ayudar, fuera de nuestros centros de culto, a nuestros conciudadanos y sensibilizar a nuestros fieles de lo importante que es preocuparse por la seguridad vial”.
Por su parte, Fernando Castro, delegado episcopal y responsable del departamento de la pastoral de la carretera de la Diócesis de Ourense aseguró que “empezamos un camino con mucha ilusión, esperanza y fe en lo que estamos haciendo porque podemos ayudar a muchas familias”. Aprovechó también su intervención para destacar todas la actividades que se incluyen en la programación de la Dióceses para este año y el que viene, entre las que destacan, relacionadas con la seguridad vial: la jornada de Delegados de la Pastoral de la Carretera, que este año se celebra en Granada del 16 al 19 de octubre; el Día Internacional en memoria de las víctimas de accidentes de tráfico, que tendrá lugar el 27 de noviembre en la Iglesia de los PP. Franciscanos; la jornada Beato Sebastián Aparicio, patrón de conductores y transportes terrestres, que se llevará a cabo el 25 de febrero; y la jornada “Enjugar las lágrimas”, que se realizará el 31 de mayo para mostrar la cercanía de la iglesia con las víctimas de accidentes de tráfico.
Cada año, realizan una memoria en la que recogen cómo funcionó la actividad acompañada de una foto. A partir de ahora, gracias a esa firma, este documento con la memoria se incluirá también en la página web de la Comisión Europea. “El siguiente paso es poner a Ourense como referente en España y Europa de una Diócesis que se implica en la mejora de los accidentes”, cloncluye Fernando.