“Busca y encuentra”. Ponía uno de los carteles del primer mercadillo vecinal de segunda mano que se celebró en el municipio de Esgos, más concretamente en la Praza de Saa y la Praza do Afiador.
El centro de la localidad se organizó para que cada vecino que quisiera dispusiera de un puesto donde mostrar a los demás vecinos y visitantes sus productos con el fin de darle una segunda oportunidad a objetos, ropa, utensilios, juguetes y otros objetos olvidados o inutilizados.
Desde el Concello de Esgos comentaron que fueron más de una quincena de puestos donde se vendía “de todo, desde muebles, hasta elementos de decoración y otras cosas”. Señalan también que la condición era catalogar los productos con precios reducidos para fomentar ese reciclaje de cosas usadas que todavía tienen nuevas vidas.
En uno de los puestos estaba Chus que decía a media mañana que “se está vendiendo bien, con este tiempo la gente se anima a venir y a echar una ojeada. Al final aquí tenemos de todo y nunca sabes lo que puedes encontrar. A veces, necesitamos algo que no sabemos”. Y añadió que “la verdad es que es una buena iniciativa para que se vea movimiento en el pueblo y también para reciclar esas cosas que no utilizamos”.
Luzmila, más conocida en el municipio como “Loli”, comentaba que “tenemos desde botas para la nieve, hasta muñecas, peluches, ropa, pantalones o una mochila para salir a caminar con el bebe”. Y explicaba que “tenemos muchas cosas que ya usaron las nietas y ahora nadie las utiliza, así que las traemos para que otras personas se las puedan llevar si le hacen falta”, antes de añadir que “está todo en perfecto estado”. En otro de los puestos había CD de música clásica para los amantes de la música y también libros antiguos con títulos únicos.
El Concello de Esgos también quiso participar activamente repartiendo regalos entre los compradores y así fomentar una jornada de convivencia social y también “darle vida al pueblo, fomentando el reciclaje y creando relaciones entre los vecinos”.
