Una deformación en la vía por el calor extremo, una de las hipótesis para el descarrilamiento de tren en Valdeorras

El siniestro no causó heridos pero cortó la circulación y ha provocado “fuertes daños” en la infraestructura

Prevén que mañana pueda reestablecerse la comunicación con León

Uno de los vagones descarrilados.

Uno de los vagones descarrilados.

J. F.

Una deformación en las vías por el calor extremo. Esta es una de las hipótesis que se barajan como causa al descarrilamiento ayer de un tren de mercancías operado por Renfe, que circulaba desde León a la estación de Vigo-Guixar, con sustancias peligrosas.

El siniestro ocurrió este miércoles por la tarde sobre las 16.45 horas en un tramo recto y paralelo a la carretera nacional N-120 a su paso por Vilamartín de Valdeorras. En total, fueron tres de los 16 vagones cargados con siete contenedores los que se salieron de la vía. Afortunadamente, no hubo que lamentar heridos, pero el suceso cortó la circulación y ha provocado “fuertes daños” en la infraestructura y la catenaria, según Adif.

A primera hora de hoy, jueves, fue apartado hasta A Rúa-Petín el tren de la incidencia. Una vez retirado, se analizaron los daños causados en la infraestructura para proceder a su reparación. Prevén que los trabajos permitan recuperar la circulación a partir de mañana por la mañana.

Con la investigación aún abierta, se baraja la opción de que la deformación de debiese a las "altas temperaturas registradas, pero es un extremo que aún no ha sido confirmado, porque las causas están siendo analizadas", indican fuentes de Renfe.

La carretera afectada por el descarrilamiento.

La carretera afectada por el descarrilamiento. / CEDIDA

Servicios afectados

El siniestro cortó la circulación entre Vilamartín de Valdeorras y A Rúa, puesto que se trata de una vía única, además de una carretera local. Varios conductores que circulaban por la N-120, que discurre en paralelo al trazado ferroviario, vieron los vagones descarrilados y alertaron al 112. El percance afectó a dos servicios el miércoles y a los cuatro programados para este jueves. Renfe, que operaba el tren de mercancías, estableció un plan alternativo de transporte por carretera para los viajeros que se han visto afectados.

El jueves por la mañana, los pasajeros del regional de Ponferrada a Ourense realizaron la totalidad del trayecto en autobús fletado por la operadora. A los viajeros de un Alvia entre Galicia y Barcelona los llevaron por carretera desde Monforte de Lemos a Ponferrada, desde donde continuaron su viaje en tren. Hoy por la tarde resultaron afectados dos servicios más. Un regional de Vigo a Ponferrada, con transporte por carretera entre Monforte y Ponferrada, así como un Alvia de Barcelona a Galicia, cuyos pasajeros completaron la ruta, por carretera, desde Ponferrada a su destino. Estos dos servicios son los dos que resultaron afectados el miércoles.

El aire libre evita el riesgo por la fuga de argón

Solo tres de los vagones llevaban mercancías peligrosas. Hubo una fuga de argón líquido, pero no entraña peligro al estar al aire libre. La pérdida se detendrá una vez se consiga girar el vagón. Otro llevaba unos 3.000 litros de aceites, que están contenidos en una balsa hasta su trasvase a otro contenedor para su retirada y tratamiento definitivos.

Fue necesario realizar medidas de contención para que el vertido no se expanda. La zona fue acordonada, se estableció un perímetro de seguridad y se llevaron a cabo medidas de contención, según el 112.

En el operativo de emergencias trabajaron bomberos y GES de Valdeorras, Protección Civil, Guardia Civil y Policía Autonómica, así como personal de Adif y Renfe.

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