La defensa de los policías gemelos apela directamente a la Audiencia y la fiscal aún estudia si recurre

El abogado de los agentes a los que la jueza atribuye el asesinato de otro subraya que tres informes de la causa apuntan a un suicidio | La Fiscalía pidió el archivo en su momento

El abogado de la defensa, Neil González, con uno de los policías gemelos. |   // IÑAKI OSORIO

El abogado de la defensa, Neil González, con uno de los policías gemelos. | // IÑAKI OSORIO / J. Fraiz

Javier Fraiz

Javier Fraiz

Contra el auto de 158 páginas en el que la magistrada Eva Armesto expone con detalle las sospechas, tras siete años de investigación, por las que atribuye a los policías gemelos Roy y Bernardo D. L. el asesinato de su compañero Celso B. A con una de las seis armas robadas en el búnker de la comisaría de Ourense –apareció muerto en la sede policial, con un disparo en la cabeza, el 9 de abril de 2016–, la defensa está preparando un recurso que presentará directamente apelación, para que la Audiencia Provincial resuelva si deben ser juzgados con un tribunal del jurado, o –como sostiene el letrado– no hay base para que se sienten en el banquillo por asesinato y robo con fuerza.

La jueza observa una docena de “evidencias” a partir de las que concluye que los hermanos –en libertad desde su detención en enero de 2018, y con la obligación de comparecer en el juzgado ya solo una vez al mes– presuntamente planificaron el crimen y trataron de simular un suicidio, atribuyendo en exclusiva a la víctima –a través de un wasap y un correo electrónico remitidos con su nombre– el envío de los anónimos y el robo de las armas. Según la instructora, estaban “temerosos de que su compañero terminara por confesar” la implicación de los tres en la trama.

El letrado de Roy y Bernardo, Neil González, dispone de plazo hasta la próxima semana para presentar sus argumentos. Como ya ha expuesto a lo largo de la fase de instrucción, la defensa subraya que hasta tres informes policiales en la causa se decantan por la hipótesis del suicidio. Es lo que consideran Asuntos Internos, la Guardia Civil y la sección de Homicidios y Desaparecidos de la Brigada Central de Delitos contra las personas, en un dictamen de 2019, a partir de toda la información del sumario.

A la vista de esos informes, en su momento la Fiscalía de Ourense solicitó el sobreseimiento de la causa. Su postura a favor del archivo de las actuaciones ha coincidido con la de la defensa, lo que es inusual en causas por presuntos delitos contra las personas. Por ahora, el ministerio público no ha movido ficha después de recibir el auto de la magistrada Eva Armesto. Fuentes consultadas indican que la fiscal del caso continúa “estudiando” la resolución, para decidir si presenta o no un recurso.

Varias acusaciones

Más de 20.000 folios acumula este sumario. En el procedimiento judicial están personados, además de la Fiscalía y de la defensa, un hermano del agente fallecido, la Abogacía del Estado, el exjefe antidroga que fue absuelto en la Zamburiña así como el agente responsable del armero, policías perjudicados por la supuesta trama de los anónimos y las armas.

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