Agentes del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico de la Guardia Civil, del subsector de Ourense, notificaron ayer por la mañana al presidente provincial de la Diputación y del PP de Ourense, Manuel Baltar, la apertura de diligencias por la posible comisión de un delito contra la seguridad vial tras ser interceptado, el domingo, por una patrulla de Tráfico en la A-52 a la altura de Astureses, en Zamora, conduciendo el vehículo oficial de la Diputación, en dirección a Madrid, a 215 kilómetros por hora en una vía en la que el máximo permitido es de 120.

Además, la Guardia Civil, según informa Europa Press, ha remitido al Juzgado de Puebla de Sanabria, partido judicial al que pertenece el lugar donde se produjo la infracción, el atestado por exceso de velocidad, por que el ‘barón’ del PP se expone a un juicio rápido en el plazo máximo de dos o tres días.

Baltar recibió la notificación oficial de la apertura de esas diligencias de investigación cuando se encontraba en visita institucional en el Concello de Leiro.

El gabinete de prensa de la Diputación emitió a última hora de la tarde una escueta nota en la que se limita a “lamentar, tanto las consecuencias que se puedan derivar de estas comunicaciones recibidas, como la propia situación generada”. También se indica que el presidente, “por recomendación expresa de su abogado, no realizará declaraciones sobre este asunto a la espera de que concluya las actuaciones correspondientes”.

José Manuel Baltar se sube a su coche oficial, en una imagen de archivo Iñaki Osorio

Baltar guarda silencio

El gabinete de prensa de la Diputación emitió a última hora de la tarde una escueta nota en la que se limita a “lamentar, tanto las consecuencias que se puedan derivar de estas comunicaciones recibidas, como la propia situación generada”. También se indica que el presidente, “por recomendación expresa de su abogado, no realizará declaraciones sobre este asunto a la espera de que concluya las actuaciones correspondientes”.

Por su parte, fuentes próximas al ‘barón’ del PP aseguraron que Baltar ya ha abonado los 300 euros de la sanción administrativa de 600 euros que se le impuso por exceso de velocidad, multa que se redujo a la mitad por pronto pago. También se le retiran 6 puntos del carnet si el proceso queda solo en vía administrativa.

Los guardias civiles de Tráfico que le interceptaron en la tarde del pasado domingo en Zamora, cuando según testimonio oficial se dirigía a trabajar a Madrid en una de las fundaciones que preside, no le realizaron test de alcoholemia o drogas porque no percibieron síntomas ni hubo siniestro, ya de que lo contrario estos análisis sí serían obligatorios.

De acuerdo al artículo 379.1 del Código Penal todo aquel vehículo que circule en estas vías urbanas 80 kilómetros por hora por encima del límite permitido –y el vehículo que conducía Baltar lo hacía supuestamente a 95 km/h– puede ser castigado con pena de prisión de tres a seis meses, con multa de seis a doce meses o con trabajos a beneficio de la comunidad.

La noticia causó un auténtico revuelo entre los grupos de oposición, por el perfil del infractor, Manuel Baltar, continuador de una saga política que inauguró su padre José Luis Baltar, que rige los destinos de la Diputación de Ourense desde hace más de tres décadas y del PP, y que es el auténtico “granero” para los populares gallegos.

Revuelo político

El primer tsunami se producía ayer en el del Parlamento, donde BNG y PSdeG aprovecharon la sesión de control para urgir al presidente de la Xunta y líder del PPdeG, Alfonso Rueda, que exija responsabilidades al presidente del PP ourensano y de la Diputación.

Rueda fue interpelado de forma directa por la líder del BNG, Ana Pontón, y por el portavoz socialista, Luis Álvarez, pero evitó dar explicaciones ante la Cámara. No dijo ni una palabra sobre el asunto.

Pero posteriormente, en un acto en Pontevedra y a preguntas de los periodistas, Rueda lamentaba los hechos y se mostró “seguro” de que Manuel Baltar “es el primero que lo siente”.

El presidente gallego aseguró que habló con el titular de la Diputación de Ourense y que este le admitió los hechos “hasta el punto de que hay una sanción que él paga”. Pero, en el momento en que Alfonso Rueda hizo estas declaraciones, se hablaba aún de sanción administrativa. Horas después lo que se investiga es un posible delito por la vía penal.

Para Ana Pontón, Baltar ha cometido “un delito contra la seguridad vial” que supone “un peligro” para la vida de las personas y apuntó directamente al jefe de filas del PP gallego. “¿Va a exigir responsabilidades a Baltar o no puede porque no tiene responsabilidad para hacerlo?”, le preguntó.

También Luis Álvarez remarcó, durante su pregunta, que “en Ourense manda Baltar” y cuestionó a Rueda por si exigirá “algún tipo de responsabilidad” por el “gravísimo hecho” protagonizado por el dirigente al volante de un coche de la Diputación.

Más contundente se mostró el PSdeG-PSOE ourensano, que pidió directamente la “dimisión inmediata” de Baltar. Los socialistas, en un comunicado remitido a los medios, calificaron de “absolutamente inaceptable” que el máximo representante de la institución provincial cometa un delito tan “grave”, y demandaron explicaciones tras asegurar que no tienen constancia de que tuviese actos de agenda en Madrid. “No puede continuar ni un minuto más al frente de la Presidencia de la Diputación por decencia democrática”, censuró el PSOE.

El porcentaje de error del radar, la clave

Según fuentes de Tráfico consultadas, una de las claves que, en ocasiones, utilizan los conductores cuando recurren la sanción, o que pesa en la investigación, es el margen de error reconocido por la propia Dirección General de Tráfico, en los radares que controlan la velocidad de los turismos en carretera y multan en consecuencia y que puede ser del 5 al 7%. La Orden ICT/155/2020 de 7 de febrero establece diferentes márgenes de error en función de si se trata de un radar fijo, móvil o aéreo. En los radares en instalación móvil sobre vehículo el margen de error es de -7 km/h hasta 100 km/h y de -7% a partir de 100 km/h. En los radares fijos y radares móviles de trípode o instalados en vehículos parados: el margen de error es de -5 km/h hasta 100 km/h y de -5% a partir de 100 km/h.