Tres aspirantes a sacerdotes celebraron el rito de admisión

Es el primero de los pasos que tendrán que dar durante su formación | La misa estuvo oficiada por el obispo de Ourense

Los tres aspirantes a sacerdotes y el obispo, oficiando.   | // IÑAKI OSORIO

Los tres aspirantes a sacerdotes y el obispo, oficiando. | // IÑAKI OSORIO / Edith Filgueira

Edith Filgueira

La iglesia del Seminario Mayor de Ourense acogió ayer el emotivo rito de admisión a las Sagradas Órdenes de tres jóvenes seminaristas. La misa, celebrada a las 11.30 horas, estuvo oficiada por el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet y a ella asistieron familiares de los que, a partir de ahora, son firmes aspirantes a sacerdotes.

A lo largo de toda la preparación a la que se enfrentan los seminaristas que continúan su formación para dedicar su vida a la Iglesia hay unas fechas significativas que se viven con especial emoción por la importancia que entrañan. Una de esas era la de ayer. “Es un rito en el que se los admite, de manera oficial, para poder convertirse algún día en sacerdotes. No solo se compromete la institución a formarlos y prepararlos, sino que ellos también se comprometen a esforzarse en el proceso. Es el primer paso de todos los que tendrán que dar después”, resumía José Manuel Salgado, delegado episcopal.

Jóvenes comprometidos

Los que ayer dieron el paso al frente son alumnos del seminario (primero estudiaron en el menor y ahora continúan en el mayor) desde pequeños y los tres tienen menos de 22 años. Esto genera cierta alegría puesto que en los últimos años escasean los jóvenes que tomen el relevo a los que van colgando los hábitos.

Francisco Blanco, nacido en 2002, expresaba al terminar el acto que para él era una jornada “muy emotiva” por poder comprobar toda la gente que asistió a apoyarlo en ese día. “Que viniera el obispo, en nombre de la Iglesia, y otros sacerdotes y amigos nos da un pequeño impulso para seguir adelante en este camino hacia el sacerdocio. Sirve para recargar las pilas”, explicaba tras la misa.

Jaime Vales, dos años menor que el anterior protagonista, también calificaba la jornada vivida ayer como “muy ilusionante y emotiva” porque es el momento en el que manifiestan públicamente su intención de consagrase algún día para llegar a ser sacerdotes. “Es un paso muy importante en nuestras vidas”, incidía.

El tercero de los aspirantes, natural de Vilardevós y nacido en el 2001, confesaba que los nervios hicieron acto de presencia durante el ritual. “He sudado bastante, pero sentí mucha alegría y emoción”, contaba sonriendo. “Con tanta ilusión contenida a veces uno no es plenamente consciente de todo lo que pasa a su alrededor”, añadía.

Día de los seminarios

En las diferentes parroquias de la diócesis se celebra hoy el día de los seminarios con una misa y una colecta para los dos edificios de esta naturaleza de Ourense. “El modo de celebrarlo conjuntamente ha sido el rito de hoy. Siempre aprovechamos estas fechas para realizar las ordenaciones de diáconos y sacerdotes u organizar alguno de estos pasos que dan los seminaristas”, contaba ayer el delegado episcopal.