Un conductor temerario, que lesionó a tres policías, acepta 3 años y medio de cárcel

El condenado, que está en prisión, se saltó un control y se negó a hacerse la prueba de alcohol

La sala del Juzgado de lo Penal Nº1 en el día de ayer .   | // F.C.

La sala del Juzgado de lo Penal Nº1 en el día de ayer . | // F.C. / REDACCIÓN

REDACCIÓN

El 6 de septiembre de 2019, I.G.G. circulaba en su automóvil sin seguro por las calles de la ciudad y tras saltarse un control policial empezó una huida temeraria, para después lesionar a varios agentes. Estos hechos se juzgaban ayer en la sala del Juzgado de lo Penal Nº1 de Ourense donde el acusado de un delito de conducción temeraria, un delito de atentado con lesiones, dos delitos de lesiones, un delito por la negativa a hacerse la prueba de alcoholemia y un delito de daños aceptó una pena de 3 años y 6 meses de prisión, después de que el Ministerio Fiscal le rebajase considerablemente la condena. El Ministerio Público solicitaba 9 años de prisión por todos esos delitos y atendiendo al atenuante de “grave adicción a la cocaína que limita su facultad intelectual” disminuyó su petición.

En el transcurso del pleito judicial, la acusación particular de uno de los agentes retiró el delito de desobediencia de su petición y mostró su conformidad con la petición de la Fiscalía.

Así pues, el condenado, que actualmente está en prisión por otra pena y que tiene antecedentes penales por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y que está pendiente de otras condenas, fue penado con dos años cárcel por el delito de atentado y lesiones; seis meses de prisión por el delito de conducción temeraria; seis meses de prisión por la negativa a realizar el test de alcoholemia y tres meses por cada uno de los dos delitos de lesiones. En total son 3,6 años de cárcel, a los que se le suma una responsabilidad civil que fue retirada.

Los hechos pudieron revestir una mayor gravedad ya que según consta en el escrito de calificación del Ministerio Público uno de los policías comentó que “llegó a circular por la acera, donde caminaba una menor de 13 años, a la que puso en peligro”. En el escrito también consta la negativa del ahora condenado a la prueba de alcoholemia y la descripción de los agentes en el momento de pedirle que se sometiera al test: “Presentaba síntomas de embriaguez como apatía, agotamiento, vestidos sucios y con olor a alcohol, rostro congestionado, conjuntiva enrojecida hemorrágica, pupilas algo dilatadas, comportamiento desinhibido, habla pastosa, halitosis alcohólica notoria a distancia y muy fuerte de cerca, falta de conexión lógica en las expresiones y movimiento oscilante de la verticalidad del cuerpo”.

Los agentes también relatan como invadió la trayectoria de una motocicleta policial e impactó contra ella, provocando un fuerte golpe en la rodilla derecha a un inspector que salió despedido y quedó postrado en el suelo. Para su recuperación tardó 180 días y todavía le quedan secuelas.

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