La fuerte crecida de los ríos activa la alerta por desbordamiento en el Miño, Sil, Avia y Arnoia

Descargas en el embalse de Velle, en Ourense.

Descargas en el embalse de Velle, en Ourense. / INAKI OSORIO

Las crecidas de los ríos debido a las intensas lluvias provocadas por el temporal provocaron inundaciones y cortes de carreteras este martes. La preocupación de los alcaldes de las zonas más afectadas va en aumento porque a esto se une la nieve que también acabará elevando el nivel de los ríos. Tras varios meses muy húmedos, especialmente las últimas semanas, los caudales circulan muy por encima de lo habitual y en las últimas horas se han activado las alertas en varias estaciones de la demarcación ourensana.

Así, el Plan Especial por riesgo de inundación en Galicia (INUNGAL) que activó este lunes la Dirección Xeral de Emerxencias e Interior de la Xunta ante el posible desbordamiento de varios ríos de la comunidad gallega, se extendió ayer a cuatro cauces ourensanos: Miño (en A Peroxa y Ourense), Sil (en O Barco), Avia (en Ribadavia) y Arnoia (en Arnoia). La información que trasladan los sistemas de control y seguimiento ha provocado la activación de esta alerta, ya que en varios tramos se superan los umbrales establecidos. Ante el crecimiento significativo de los niveles, señalan desde Emerxencias, “pueden llegar a darse desbordamientos puntuales”. A última hora de la tarde, el 112 confirmaba que los cuatro ríos estaban por encima de su nivel de desbordamiento.

La zona recreativa y paseos de O Tinteiro, bajo el Miño.

La zona recreativa y paseos de O Tinteiro, bajo el Miño. / INAKI OSORIO

El Miño presenta dos zonas de riesgo, en A Peroxa, donde alcanzó el nivel rojo al superar en más de dos metros el umbral máximo de alerta, y en Ourense ciudad, donde se ha salido de su cauce habitual anegando por completo las termas de A Chavasqueira (que ya habían quedado descubiertas tras el temperal del 1 de enero) y los paseos fluviales de O Tinteiro, además del área recreativa de Oira y las piscinas municipales.

La fuerte crecida de este río tiene repercusión aguas abajo, ya que todos los embalses están desaguando para dar salida a la gran cantidad de agua que lleva este cauce fluvial. En Velle, Ourense, muchos curiosos se acercaron por la tarde para observar las compuertas abiertas y la fuerza y velocidad con la que baja el río.

El Avia no logra desaguar en el Miño

En Ribadavia, el Avia se encuentra en situación de prealerta debido, precisamente, a que la fuerte crecida del Miño le impide desaguar en su tramo final. El afluente no logra penetrar en el río principal y se produce un “retroceso”. Así lo explica la alcaldesa, Noelia Rodríguez, que avanza que las zonas inundables en el entorno del río se mantendrán cerradas y ha pedido el corte de tráfico en la carretera que comunica con Arnoia. “El río Avia no va muy alto, pero el nivel es de prealerta y estamos muy atentos a la evolución porque, aunque parece que va a remitir, todo suma y con la crecida del 1 de enero todo se complica”.

El río Avia cubre la carretera de Arnoia, en Ribadavia.

El río Avia cubre la carretera de Arnoia, en Ribadavia. / FdV

La alcaldesa señalaba este martes que la situación “es preocupante” ya que todos los embalses del Miño están vertiendo, en Peares, Velle y Castrelo de Miño, y “la tendencia es a subir”.

Preocupación

Con esta incertidumbre vigilaban el estado de los ríos otros alcaldes en la provincia, ya que a medida que avanzaba la tarde el tiempo empeoraba y crecían las incidencias. En Baños de Molgas, habituados a las crecidas del Arnoia, el alcalde Xaime Iglesias confirmaba su inquietud ante la subida del nivel, si bien el caudal se mantuvo durante toda la jornada en los límites.

En O Barco de Valdeorras, donde el Sil inundó la zona de O Salgueiral, el 112 emitió una alerta roja por riesgo de desbordamiento, lo que llevó a adoptar medidas para impedir el paso del agua a las zonas con más riesgo, como las urbanizaciones de Las Huertas y Las Arenas, para lo que se usaron sacos de arena y zahorra. “El nivel del río es muy alto y estamos muy pendientes de su evolución, porque ya se ve nieve en las montañas”, señalaba a primera hora de la tarde el alcalde, Alfredo García. “Nuestra preocupación es que el agua no llegue a las casas, y por ahora tenemos margen de maniobra”, señalaba en referencia a que el caudal se encontraba todavía a un metro del umbral de alerta.

Rachas de viento de 178 km/h en Manzaneda

Ambos regidores piden a la población máxima precaución en las proximidades de los ríos, ya que el temporal continúa y se acompaña de fuertes rachas de viento. Manzaneda, donde sopló a 178 km/h a las 10.30 horas de la mañana de ayer, registró el valor máximo de Galicia.

Según el último informe semanal de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, actualizado el lunes, los embalses de la provincia se encuentran al 75,86% de su capacidad máxima, un 25% más que hace un año en estas mismas fechas y más de un 8% de su medida histórica para esta época del año, que se sitúa en el 67,5%.

La zona termal de A Chavasqueira y sus paseos, anegados.

La zona termal de A Chavasqueira y sus paseos, anegados. / INAKI OSORIO

La gran diferencia se da en los ríos, cuyos caudales se encuentran un 164% por encima de su promedio histórico. Este dato contrasta con el que se registraba hace solo un año, cuando los niveles fluviales estaban un 65,5% por debajo de su media histórica. Poco tiempo después se declaró la situación de sequía.

Más de 50 incidencias

Con todo, desde que el temporal se empezó a notar, a última hora del lunes, la central de emergencias 112 registró un total de 58 alertas por incidencias en la provincia. Entre ellas, el aviso de que el desbordamiento del Miño, en Cortegada, estaba a punto de inundar el antiguo balneario.

La alerta por temporal sigue activa, con nivel naranja por acumulación de nieve en la zona de montaña y sur de la provincia, por lo que conviene mantener la alerta y la precaución en las carreteras.

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