El “no es no” de los grupos de oposición del Concello a la propuesta revisada de Plan General de Ordenación Municipal (PXOM) que llevó el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, al pleno del lunes, no le ha hecho desistir de su idea. Pese a que restan apenas seis meses para los comicios municipales, advierte de que se van a poner a trabajar ya en un nuevo PXOM para la ciudad, este ya a su gusto y criterio “para que se pueda aprobar en 2024” indicó ayer, en un claro aviso de que piensa seguir ahí tras las elecciones.
“Vamos a empezar a trabajar en el plan para dejarlo perfilado que ahora sí que va a le vamos a dar un retoque”, advirtió a la oposición, a la que acusa de haberle echado abajo su propuesta porque “no querían injerencias”, dijo ayer. En realidad, los grupos de oposición votaron en contra –salvo el exedil de Cs, ahora no adscrito, Laureano Bermejo– porque el alcalde no convocó, denunciaron, la comisión de seguimiento del PXOM, ni consensuó con ellos un plan que recorta alturas a las torres Copasa, bajo riesgo de pago de indemnizaciones a la empresa, pero incluye sin embargo una recalificación en Finca Mariñamansa, para introducir un rascacielos de 80 alturas que sería el más alto de España.
Los principales cambios en los que va a empezar a modificar el PXOM, según dijo ayer el alcalde, es en la mejorar de las condiciones de edificabilidad en el perímetro rural, y buscar solución a las viviendas que quedan fueran de ordenación en la ciudad. También “atenderemos muchas alegaciones al plan” dijo, que no fueron atendidas por PP y PSOE en sus respectivas etapas. Ayer Jácome volvió a desautorizar sus dos oponentes, PP y PSOE, señaló y se jactó de que es él el que va a ganar las elecciones.
