El rodaje de una película volvió a llenar las termas del Muiño a Veiga. El agua fue bombeada directamente desde el Miño, ya que este espacio lleva casi tres años seco y cerrado al público.

La escena captó la atención de las personas que caminaban por la zona y algunos creyeron que se recuperaba la actividad y extendieron su toalla para darse un baño. En el lugar, Enrique Camoeiras, portavoz de la plataforma Amigos das Termas, criticó el cierre prolongado de estas infraestructuras “por capricho de alguien” y reclamó la reapertura definitiva. “Ahora dicen que se podrán abrir en unas semanas, pero por qué no mañana”, se pregunta. Confían en que el alcalde, que ha asumido las competencias de Termalismo, resuelva este conflicto. De lo contrario, pide que se permita a los usuarios ponerlas en funcionameinto.