Un hombre fue reducido a mediodía de ayer en la calle Monte do Quinxo de Ourense, colindante a Ramón Puga y próxima al complejo hospitalario de la ciudad, tras pasar más de cuatro horas atrincherado en su vivienda, con gritos contradictorios como “voy a morir” o “me los cargo a todos”, después de una supuesta discusión de madrugada con su pareja, una mujer que según el detenido le había abandonado unas horas antes, una marcha que adujo como supuesto motivo de su estado nervioso.
Policía Nacional, una ambulancia del 061 y una unidad de bomberos, entre otros, estuvieron desde primeras horas de la mañana en el entorno de la vivienda ante lo que parecía inicialmente un intento de suicidio, para tratar de convencer al individuo, de carácter difícil según sus vecinos, para que depusiera su actitud. De hecho, el resto del vecindario fue desalojado del inmueble en tanto no remataron las operaciones policiales.
Los bomberos señalan que “el hombre estaba atrincherado en su casa, en el segundo piso del inmueble número 7 de Monte do Quinxo, y nosotros en las horas que permanecimos en el lugar, estuvimos con el sistema de colchón hinchable desplegado, ante la posibilidad de que se arrojara por la ventana”, indican.
Finalmente, tras más de cuatro horas, sobre las 13.00 horas, un equipo policial especializado abría la puerta de la vivienda y conseguía reducir al individuo, que fue detenido sin que consiguiera, gracias a la eficaz operación, materializar ninguna de las amenazas contra su persona ni contra quienes profería sus amenazas.