El miércoles cumplió 7 años pero está la fiesta pendiente: no pudo soplar las velas porque, a su alrededor, al lado de su casa y las de los vecinos, el monte se consumía en llamaradas. El fuego amenazó Os Pereiros (Cartelle), una aldea de una veintena de habitantes. Horas después, rebajado el peligro, el niño jugaba con un muñeco de acción –uno de sus regalos– mientras las brigadas y sus familiares estaban pendientes de posibles reactivaciones de un incendio que en poco más de 12 horas arrasó 150 hectáreas. La estimación asciende ya a 200. El incendio, estabilizado.
“Dos autovías de fuego”, dice gráficamente el alcalde, Jaime Sousa, tuvieron en vilo la tarde y la noche del miércoles al jueves a los vecinos de esta aldea y también a los de Rabal, Noallo de Abaixo y Noallo de Arriba –en Castrelo de Miño–, de donde partió el frente.
“Organizamos tres puntos de espera para prevenir, pero con un incendio es muy difícil. El viento era muy cambiante. Gracias a Dios que el despliegue de medios fue impresionante y hubo suerte, porque se temía que con el fuego de copas, que es muy traicionero, pudiera llegar a las casas”, relata Sousa.
“Lo pasamos mal, la situación fue delicada, hubo hasta 4 kilómetros de frente y las llamas llegaron a la puerta de las casas, literalmente”, expone el regidor de Castrelo, Avelino Pazos, que ensalza el trabajo “impresionante” de los medios de extinción. Un bombero forestal resultó herido leve por quemaduras y decidió seguir trabajando. Fue atendido in situ por una ambulancia.
“Era un infierno, fue horroroso. Pensé que ardería la nave, todo esto, llegó a la puerta de casa. Hay que agradecer a quienes vinieron a ayudar y apagar, porque se portaron de maravilla”, recordaba horas después de lo peor Marisa Pereiras. La vecina lamenta la falta de cuidado y ordenación del monte. “Nadie limpia nada, la actitud es ‘cuando arda ya apagaremos’.. Si se puede, ¿y si no?”, reflexiona.
Secundino Vázquez, su marido, dice que las horas peores fueron “muy complicadas”. Destaca la labor de los medios de extinción. “Hubo cuatro motobombas y consiguieron salvar esto”. Además, los vecinos echaron la mano con mangueras y útiles caseros.
“Los políticos tienen que reunirse y dar otro orden al monte”
El matrimonio coincide en el diagnóstico de muchos residentes del rural. “Lo vemos ahora negro y había que tratar de evitarlo. En el invierno es cuando hay que solucionar la papeleta. Si no vienen a limpiar hay que tratar de hacerlo cada uno, no hay otra solución”, subraya.
“Los políticos tienen que reunirse y dar otro orden al monte”, interviene la mujer. “Ahora todo es negro ; ¿qué le dejamos a nuestros hijos y nietos?”, reflexiona. “Este ha sido un aviso más que serio”, enlaza el varón.
El incendio afectó al suministro de luz y a las comunicaciones. Operarios trabajaban ya la mañana del jueves para reponer el servicio.
"Son terroristas ambientales que intentan causar daño"
Los alcaldes creen que el origen fue intencionado. "Claramente, con dos puntos al pie de una carretera”, comparte el delegado territorial de la Xunta, Gabriel Alén. "Hay que dejar trabajar a los investigadores, pero yo estoy convencido. Son terroristas ambientales que intentan causar daño", reprocha el regidor de Castrelo.
Investigan un fuego con dos focos al pie del Camino de Santiago en Cudeiro
Siete bomberos urbanos de Ourense además de profesionales forestales actuaron la tarde del miércoles en Cudeiro, donde ardieron unas 3 hectáreas, en un incendio que se inició al pie del Camiño Real, en la Vía de la Plata.
La unidad especializada de investigación de agentes ambientales, la UIFO, trata de esclarecer las causas, pues en el inicio se distinguían dos focos próximos al pie del Camino de Santiago.