Un incendio extremo, muy virulento, en el que la orografía, el difícil acceso y la falta de pistas complican la extinción. Ayer fue el octavo día con el fuego activo en el parque natural del Invernadeiro. Van 5.800 hectáreas en la zona, sin que la Xunta precise cuántas son del paraje de alto valor ambiental, cuya extensión es de 5.722.

La alcaldesa de Vilariño cree que se han calcinado más de la mitad. Los profesionales de la extinción, dos terceras partes.

Los bomberos forestales de la BRIF de Laza suman jornadas de trabajo en el Macizo Central –ayer se sumó también la BRIF de Tabuyo del Monte, León–, atacando las llamas, con contrafuegos técnicos, soportando una gran densidad de humo. Este sábado vieron remolinos.

Son corrientes ascendentes por efecto del aire caliente del incendio. En los grandes, el humo gira sobre sí mismo en el sentido de las agujas del reloj, como los anticiclones”, dice un experto.

El incendio sigue activo, como se observa en este vídeo de la BRIF de Laza de última hora del sábado.