La sanidad pública se resiente, afectada por una pandemia que no cesa –la cifra de hospitalizaciones ascendía en Ourense este martes a 174 pacientes con COVID–, con un déficit de especialistas en varios servicios y una gestión que se ha decantado por no cubrir muchas de las plazas, más la reducción de personal de cada verano debido a las vacaciones.

El Colegio de Médicos de Ourense ha avisado de una situación “preocupante” con unos meses estivales “muy complicados”. Ahora, una decena de pediatras suscriben un escrito en el que informan y alertan a la Valedora do Pobo de sus carencias.

Los profesionales denuncian “la vulneración de los derechos sanitarios de los menores de nuestra provincia, y la retirada encubierta, y sin ninguna información a sus padres, de los servicios sanitarios a los que tienen derecho”.

En el escrito a la Valedora do Pobo, los pediatras del área sanitaria de Ourense advierten de que la política de gestión del servicio “conduce en la práctica a la eliminación total” de las consultas de especialidades, “al menos durante todo el verano”

Además, avisan del “peligro que la mala organización y la sobrecarga de los profesionales supone para la asistencia de los pacientes”. A preguntas de este periódico, el área sanitaria provincial admite el “importante” problema de personal. “Ante esta situación excepcional, estase traballando na posta en marcha de alternativas asistenciais, coa reorganización de recursos do conxunto da rede pública, cun criterio de cooperación, así como establecendo sistemas de priorización e triaxe, ata que a actual situación se resolva”, sostiene el Sergas.

Los pediatras se quejan de la “falta de previsión” de la gerencia provincial. El servicio del CHUO para la atención sanitaria de los menores de 14 años dispone en la actualidad de una planta de hospitalización convencional, una UCI y una unidad de Neonatología, que incluye UCI para los recién nacidos y en la que se atienden todas las patologías, incluidos los prematuros extremos, excepto en casos de cardiopatías que requieran cirugía, o de encefalopatías que necesiten hipotermia.

Según los médicos, hasta el mes de marzo las guardias de organizaban de manera que todos los días la jornada ordinaria estuviera cubierta por alguno de los pediatras que desarrollan su labor de manera habitual en esas áreas, para garantizar que los pacientes fueran atendidos por los profesionales con una mejor formación, “y se asegurase la continuidad asistencial”, recalcan los firmantes.

Vista, de noche, del hospital público de Ourense. BRAIS LORENZO

Para la atención ambulatoria, hay servicio de urgencias así como consultas externas de distintas especialidades, como neumología, cardiología o nefrología, entre otras. Hasta marzo, había una frecuencia variable de 3 a 5 consultas por semana. Desde febrero cambió la situación de la plantilla.

Ha habido una jubilación y cinco bajas previstas de larga duración. Los médicos denuncian que las primeras bajas y la jubilación eran previsibles y se produjeron antes de que los residentes MIR finalizaran su especialización, de modo que “había disponibilidad de pediatras que buscaban ofertas de trabajo”. Sin embargo, según critica el colectivo, “la gerencia decidió no cubrir dichas bajas, de forma que la asistencia en nuestro servicio se solventó con la sobrecarga de trabajo de los pediatras y con la disminución de los servicios de consultas”, afirman.

Con posterioridad se produjeron dos bajas más un cese en el hospital de Valdeorras, donde solo queda ya un pediatra, cuyas vacaciones y libranzas deben suplirse con personal que se desplaza desde Ourense, más de 100 kilómetros.

“En ese momento, la gerencia decide que una plantilla ya previamente mermada cubra las guardias de ambos centros, realizando un número de horas muy por encima del máximo legal y generando un elevado número de libranzas”, puesto que tras una guardia de 24 horas no se trabaja la mañana siguiente.

"Los pacientes pasan a un ‘buzón’ de espera sin previsión de nueva fecha, y sin ofertarle otro tipo de solución para recibir atención”

Los pediatras acusan a la dirección del área sanitaria de que ha “impuesto” un calendario de guardias, “dificultando la conciliación y organización de los profesionales, y en el que ni siquiera así han conseguido cubrir todo el mes, permaneciendo 5 guardias sin cubrir. A día de hoy, todavía no se sabe cómo se van a solucionar”, aseguran los firmantes.

En el escrito dirigido a la Valedora do Pobo y al Vicevaledor do Paciente, los pediatras del área sanitaria de Ourense advierten de que la política de gestión del servicio “conduce en la práctica a la eliminación total” de las consultas de especialidades, “al menos durante todo el verano”.

Critican que la gerencia, “en lugar de informar a los pacientes de esta situación y buscar sistemas de derivación que garanticen la asistencia, se limita a anular citas y decir falsamente a las familias que serán citadas próximamente”.

“La demora de estas consultas puede suponer un riesgo para la salud”

Los médicos afirman que “la realidad es que los pacientes pasan a un ‘buzón’ de espera sin previsión de nueva fecha, y sin ofertarle otro tipo de solución para recibir atención”. El colectivo recuerda que “la demora de estas consultas puede suponer un riesgo para la salud”.

Además, añaden que este sistema genera que el servicio, de referencia provincial, y al que habitualmente se trasladan los pacientes que no pueden asumir los dos hospitales comarcales de O Barco de Valdeorras y Verín, esté “prácticamente desatendido en sus áreas específicas de hospitalización”.

"Los menores ingresados serán atendidos cada día por un profesional diferente"

Este mes de julio, durante la jornada ordinaria de mañana, en el centro habrá entre 4 y 8 pediatras, una cifra que varía según el día y las guardias, para cubrir todas las áreas del servicio. “Es un número claramente insuficiente para asegurar la adecuada atención del paciente”, subrayan los pediatras.

“La organización es tan caótica que tampoco se puede asegurar la continuidad asistencial, de forma que los menores ingresados serán atendidos cada día por un profesional diferente que, en muchas ocasiones, desarrolla su actividad habitualmente en otras áreas o subespecialidades”, recoge el escrito.

"Habrá padres que sufrirán ingresos de sus hijos recién nacidos, durante más de dos meses, desplazados fuera de la provincia, cuando en Ourense existe una unidad dotada para atenderlos, pero con sus pediatras desplazados a otro centro"

Los médicos alertan a la Valedora de un hecho que puede suponer incómodos traslados y estancias, por regla general en el hospital de Vigo, el de referencia para Ourense. Una situación difícil para los padres que resulta un obstáculo a la hora de conciliar.

“La propia gerencia ha admitido renunciar a la atención de prematuros menores de 30 semanas, que serán derivados a otro centro, pero esto supone que habrá padres que sufrirán ingresos de sus hijos recién nacidos, durante más de dos meses, desplazados fuera de la provincia, cuando en Ourense existe una unidad dotada para atenderlos, pero con sus pediatras desplazados a otro centro”.

El colectivo lamenta que la dirección del área sanitaria les responda “con la excepcionalidad y temporalidad de la situación (a pesar de que ya hace meses se les puso en conocimiento de las futuras bajas), y diciendo que, ahora sí, están buscando pediatras para contratar. La realidad es que no han ofrecido ningún contrato ni han contactado con ningún pediatra de las listas de contratación, ni con los que han finalizado recientemente su especialización”, afirman.

El jefe de servicio de Pediatría, Santiago Cebrián, y el gerente del área sanitaria provincial, Félix Rubial. INAKI OSORIO

El Sergas prioriza la cobertura de guardias y la contratación en atención primaria

El Sergas señala que “a concatenación de baixas laborais e permisos xustificados de pediatras na área sanitaria de Ourense, Verín e Valdeorras, e a súa coincidencia no periodo vacacional, está a xerar un importante déficit de persoal que, ante a imposibilidade de contar con substitutos, fai que se esté a priorizar a contratación dispoñible en atención primaria –dacordo co criterio marco da propia Consellería de Sanidade–, así como a garantir, cos recursos dispoñibles, a asistencia urxente, coa cobertura das gardas nos hospitais de Ourense e Valdeorras”.

El área sanitaria: "Somos conscientes do nivel de sobrecarga e agradecemos o esforzo dos profesionais en activo, así como da incidencia na asistencia ordinaria, que se corrixirá coa maior axilidade posible unha vez se restableza a normalidade"

Según la administración, “ante esta situación excepcional, desde a área sanitaria estase traballando na posta en marcha de alternativas asistenciais, coa reorganización de recursos do conxunto da rede pública, cun criterio de cooperación, así como establecendo sistemas de priorización e triaxe, ata que a actual situación se resolva. Somos conscientes do nivel de sobrecarga e agradecemos o esforzo dos profesionais en activo, así como da incidencia na asistencia ordinaria, que se corrixirá coa maior axilidade posible unha vez se restableza a normalidade”, asegura el Sergas.