Los profesionales del sector del taxi están molestos con las condiciones con las que trabajan en la estación intermodal de Ourense. En la actualidad, la explanada de acceso al recinto de la estación no cuenta con ningún elemento de protección contra las inclemencias meteorológicas ni tampoco contra el fuerte calor que está acechando en la época estival la provincia de Ourense. Uno de los taxistas dice que “trabajar aquí es de ser valientes”.

Un grupo de ellos, busca cobijo en una sombra que da una torreta del aparcamiento subterráneo, mientras miran si ven usuarios que se bajan del tren. Otro de ellos coge un paraguas mientras señala que “nos dijeron que ya estaba proyectada una cúpula cuando renovaran la estación de tren, pero mientras tanto nos estamos achicharrando al calor, eso es insoportable”. Ni árboles, ni cúpula solo cemento en una explanada de más cien metros, donde los taxistas tienen sol durante todo el día.

“No es solo el calor y el sol, también la lluvia”, habla otro mientras se sube al taxi con una turista. Reclaman medidas provisionales para realizar su trabajo en unas condiciones dignas y le piden a las administraciones soluciones, mientras no llegan las ansiadas obras de reforma de la estación.