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Una parada tranquila en el Camino y la puerta abierta a un monasterio del siglo XII

Medio millar de peregrinos de 30 países se han hospedado en dos meses en el nuevo albergue de Oseira, que amplía las plazas de alojamiento en el entorno del cenobio cisterciense, en la Vía de la Plata

Uno de los hospederos, Iago De Juana, con un grupo de peregrinos, ante el nuevo albergue de Oseira, con el monasterio detrás. IÑAKI OSORIO

Se oye cerca el rumor del río Oseira mientras atraviesa el campo de Casledo, y las colinas circundantes desprenden la paleta de colores de la vegetación de primavera, y el viento acuna los árboles, incluso en verano. El paisaje, que favorece momentos de contemplación, explica la vida tranquila y pausada que se detiene en el tiempo en el monasterio cisterciense del municipio ourensano de Cea, cuyo origen se remonta al siglo XII.

En Oseira, en un ligero desvío en el trayecto a Santiago para los peregrinos que realizan la ruta mozárabe, la Vía de la Plata, la paz favorece el descanso para el aliento de las etapas definitivas, hasta la culminación del viaje –físico y emocional– en el Obradoiro.

El nuevo albergue de peregrinos, junto al monasterio de Oseira. BRAIS LORENZO

"Los que vienen pueden descansar y encontrar la espiritualidad"

El 11 de abril se inauguró el nuevo albergue de peregrinos de Oseira, tras una inversión de la Xunta de un millón de euros. Por el nuevo recurso habían pasado, hasta la tarde de este miércoles, casi medio millar de peregrinos de más de 30 nacionalidades, la mayoría españoles y, entre los extranjeros, franceses y alemanes sobre todo.

Las visitas acumuladas en estos dos meses remiten a varios lugares del globo: Estados Unidos, Singapur, Australia...

“Quien acude se va con un sabor de boca muy agradable, por el relax y desconexión total que consiguen aquí en comparación con la vida en una ciudad. Los que vienen pueden descansar y encontrar la espiritualidad, con las visitas guiadas al monasterio”, señala Iago De Juana, uno de los dos trabajadores del albergue, que cuenta con 42 plazas, dos de ellas en una habitación con baño adaptado para personas con movilidad reducida.

Una de las estancias de descanso en el albergue de Oseira. INAKI OSORIO

Este nuevo recurso, que forma parte de la red de albergues públicos de Galicia, eleva a 74 las plazas disponibles en Oseira, incluyendo la oferta del albergue antiguo, que continúa en uso, y que fue rehabilitado por la Xunta dentro de la inversión total de un millón.

La estancia compartida para los peregrinos que pernoctan en el nuevo albergue de Oseira. BRAIS LORENZO

El monasterio, además, cuenta con una hospedería, a la que desde hace décadas acuden quienes buscan un retiro espiritual, pudiendo compartir rezos y recogimiento con los monjes. El escritor británico Graham Greene volvía cada verano, durante casi veinte años, y ahí escribió la novela ‘Monseñor Quijote’.

Monjes en la iglesia del monasterio de Oseira. BRAIS LORENZO

Una visita guiada en el monasterio de Oseira. BRAIS LORENZO

Un mes y mil kilómetros a pie

El miércoles de esta semana, Luigi y su mujer Donatella, italianos de la región de Liguria, descansaban en Oseira tras una visita “sorprendente” al cenobio. Hoy está previsto que alcancen la Plaza del Obradoiro, tras un mes de viaje a pie por la Vía de la Plata, desde Sevilla a Compostela, casi 1.000 kilómetros.

“Cuando terminas un Camino hay alegría y tristeza a la vez”, dice el varón, de 59 años.

Varios peregrinos que se alojaron, este pasado miércoles, en el nuevo albergue de Oseira. INAKI OSORIO

La pareja, que peregrina “por pasión y espiritualidad”, completa su tercera ruta, tras completar el francés en 2017, que prolongaron desde Santiago a Fisterra y Muxía, y el portugués desde Lisboa, en 2018.

Esta vez, en pleno Xacobeo, Luigi ha notado que en la Vía de la Plata, potenciada en Galicia por el AVE, “hay muchos peregrinos”. Oseira, donde la vida monástica resiste al paso de nueve siglos, han hallado más paz.

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