Pilar Garzón (Salamanca, 1978) concilia a la par que explica que hay “unión” en el Colegio de Médicos de Ourense, que preside después de suceder a José Luis Jiménez. La nueva junta directiva mantendrá la línea de trabajo y hay “novedades” en algunos cargos, siempre con el objetivo de “potenciar” la organización y dar respuestas a las necesidades de los colegiados.
–La primera mujer de un Colegio de Médicos de Galicia...
–Sí y la más joven junto con otro presidente de toda España. Solamente, el presidente del Colegio de Baleares y yo, somos los más jóvenes de las organizaciones colegiales.
–¿Cómo va a ser suceder a José Luis Jiménez?
–Será difícil, va a ser complicado sucederlo y superarlo, pero tanto a él como al resto de presidentes que han pasado por la organización. La verdad es que han hecho un gran trabajo en los últimos años.
–¿Cuáles son sus retos?
–El principal reto, tanto mío como de la nueva junta, será intentar solucionar los problemas que tiene ahora mismo la profesión después de la pandemia. Hemos pasado tiempos difíciles y la fatiga de la población se transmite también en los profesionales, que hemos sufrido las partes malas de la pandemia: el confinamiento, la sobrecarga hospitalaria, la atención a los pacientes COVID... El mayor reto que tenemos es paliar esa desesperanza que tienen los profesionales, para que mejoren y tengamos más esperanza y visión positiva.
–¿Cómo puede contribuir el Colegio de Médicos a ese reto?
–Lógicamente no tenemos capacidad gestora o administrativa, pero tenemos una función asesora. Así que determinadas actuaciones pueden contribuir a esa mejora de la situación y llegar propuestas a la gerencia y a la Consellería para mejorar la situación.
–¿Cómo deja la pandemia del COVID a los profesionales médicos y al Colegio? ¿Qué salud tienen?
–Todos hemos pasado una época muy mala y vemos que estamos saliendo de ella, pero estamos viviendo que salir de todo es complicado. Nosotros a mayores se une la problemática de la incertidumbre de la atención sanitaria, viendo paciente que se morían delante de nosotros sin que pudiéramos hacer nada por ellos. La soledad del profesional con el paciente, el trabajar con los epis y la sobrecarga asistencial, desde el 2008 y más agravada con la pandemia, han hecho que todo fuera y sea más complicado. La sobrecarga, sobre todo, ha llegado a unos niveles de estrés muy grande en los profesionales. Cuando se las circunstancias obligan a ver un paciente cada dos minutos es imposible que esa asistencia sea la correcta para los pacientes y eso genera frustración y desesperanza en los profesionales.
–¿Usted se ha vacunado?
–Sí, por supuesto.
–Las estadísticas indican que hay profesionales que todavía no lo han hecho, ¿qué les diría?
–Cada uno es libre de tomar sus decisiones, pero hay evidencias científicas obvias y una de ellas es que la vacunación ha salvado a millones de personas en España y en todo el mundo con un “milagro científico”, por la celeridad del proceso de la vacunación. Hay que agradecer a los científicos por la creación y los profesionales por su gestión, los números no fallan, lo dijo Fernando Simón en una charla en el Colegio de Médicos hace unos días. Si no hubiese habido una vacunación masiva de la población, sería difícil asumir todos los muertos que supondría la pandemia.
–Las Urgencias con protestas, los sindicatos con parones, aunque no muy seguidos, falta de médicos de Atención Primaria, sobrecarga, ¿hay problemas estructurales en la Sanidad?
–Sí, los hay. Tenemos que tener en cuenta que la población cada vez está más envejecida, por suerte, pero ello supone que muchas de ellas tengan múltiples patologías que hacen que la atención de los pacientes sea más difícil, porque no es una patología si no que son varias. Las circunstancias de la edad, del rural, de la despoblación hace que la sanidad tengan problemas estructurales y que sea deficitaria en muchos puntos.
–¿Cómo le gustaría dejar el Colegio de Médicos al final de su mandato?.
–Pues me gustaría que quedara como ha sido hasta ahora, pero sobre todo intentando potenciarlo más como un nexo de unión entre todos los médicos y como realmente es que es la casa de todos los médicos. A las nuevas generaciones estas instituciones les resultan un poco antiguo y sin uso, pero realmente no es así, porque el Colegio está para todos desde el más joven al más mayor. Queremos que sientan que las necesidades que puedan tener, las puedan resolver en el Colegio de cualquier manera”.
