Celanova es una villa musical desde tiempos remotos, pero sobre todo desde la aparición de la banda de música y de la asociación que la mantiene, que ya es centenaria. Su actual directiva tomó posesión hace casi dos años y quiere que el municipio de Celanova tenga un museo sobre su mítica formación, con más de 170 años de historia. Además, contará a partir de hoy con una nueva formación musical local, la big band, la sexta dependiente de la Escuela de Música de Celanova.

La presentación oficial de esta iniciativa será este viernes, a partir de las 20.00 horas, con un concierto en el auditorio municipal “Ilduara” , para ofrecer una música alternativa y menos convencional. La nueva banda ensaya bajo la dirección de un exprofesor de la escuela, Jesús Díaz Castro, y la integran una veintena de músicos de todas las edades, entre los cuales están integrantes actuales y retirados de la escuela celanovesa, incluidas varias voces, una novedad. Se suma así a la banda de música municipal titular, la sección infantil de la misma y la charanga para eventos informales, que están bajo la batuta de Miguel Pérez Lorenzo. También pertenecen a la escuela celanovesa el cuarteto de clarinete y el quinteto de metal Celanova Brass, que dirige Jorge González. El presidente de la asociación de amigos de la banda de música de Celanova, Fernando Martínez, explica que esta nueva agrupación sirve para estimular a los integrantes de la escuela, y que “hay otras iniciativas similares en marcha”.

Entre los numerosos proyectos de la asociación, se encuentra la instalación en la villa de San Rosendo de un museo dedicado a la banda de Celanova y a la asociación de amigos para el cual están buscando apoyos. Según el secretario del colectivo, Alejandro Mínguez, “la formación tiene historia, entidad y material suficiente, merecedor de un museo”, que sería un atractivo más a nivel turístico para Celanova, pero también serviría como fuente para estudios e investigaciones musicales.

Recuperar las actuaciones

A pesar del descenso de actuaciones a causa de la pandemia, la escuela no ha bajado el nivel de actividad, y esperan que este verano se recuperen las fiestas populares y conciertos, de modo que puedan de nuevo salir a la calle como antes.