Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Vuelven las ceremonias post-COVID con hasta 300 invitados

Tras el parón de la pandemia, el verano de 2022 será el despegue de decenas de negocios de trajes de novia, viajes, complementos y los banquetes, ya sin restricciones | El gasto medio de una boda ronda los 21.000 euros

Carmen Cid, con los trajes de novia preparados para la presente temporada FERNANDO CASANOVA

De los dos años de parón por el COVID, a un auténtico overbooking de “sí quieros” y todo tipo de ceremonias para disfrutar sin recortes. El verano de 2022 es ya, sin duda, según todos los sectores del pequeño comercio y la hostelería consultados, el de la recuperación.

Los meses de julio, agosto y septiembre van a aglutinar cerca del 80% de las bodas previstas en Ourense, y el 88% serán en sábado, según las previsiones de parroquias y de los datos que las parejas de la provincia han enviado a bodas.net. Ya no se exigen mascarillas ni aforo limitado y el gasto medio para una boda –las ceremonias que más dinero mueven– oscila de los 21.000 euros a los 32.000 para un convite de 100 invitados, incluyendo todos los apartados que son en torno a una veintena. El precio sube luego según se incorporan extras, y ya, sin límites, para los que ya no regatean en sumarle ceros a los gastos de su “gran día”.

De pruebas para una próxima ceremonia este verano FERNANDO CASANOVA

Más de veinte sectores se benefician

Desde el Pazo de la Almuzara, en Boborás, confirman que tienen ya “43 bodas concertadas, desde el 30 de abril hasta noviembre, y algunas con más de 300 invitados. No incluimos en la cifra las comuniones o bautizos, con atracciones, animación, y algunas con más invitados que muchas bodas”, explica Felipe Gallego, encargado de este local, cuyos menús son elaborados por El Barazal.

El precio medio, casi básico, de 21.000 euros por todo lo que implica para el comercio local cada boda, se hace incluyendo un mínimo de 21 conceptos que, según las empresas especializadas –en Ourense hay varias–, supone una ceremonia de este tipo .

Desde la wedding planner, una figura al alza que organiza y asesora a las parejas (a partir de 150 euros); música en directo (mínimo 400 a 700 euros); fotógrafo de boda (por encima de los 1.000 euros); trajes de novio y novia (más de 2.200 euros ambos si no se estiran); viaje de novios (no menos de 3.000 euros); menú (unos 100 euros/persona en la provincia); alquiler de coche clásico (350 euros); regalos para invitados (unos 6 euros por persona) y así hasta el infinito.

Pero esas cifras pueden ser casi ridículas en entornos como Avión y Boborás, cuna de algunas de las fortunas de la emigración, donde “hay ceremonias en las que, solo en mesa dulce –es decir, golosinas– se gastan hasta 3.000 euros y bodas en las que la novia quiso 200 rosas blancas colgadas del techo, una por cada invitado, con lo cual el apartado de adornos florales, que ya es una inversión, se dispara aún más”, indica Gallego.

Desde A Carballeira de Santa Cruz, Maricel Alonso ratifica que, “tenemos muchas más reservas, aunque la temporada es del 30 de abril hasta el 5 de septiembre. Mantenemos medidas sanitarias, pero sin restricciones ni límites de invitados. Necesitábamos volver a la normalidad”, afirma.

Pese a todo, la estrella es la novia y su traje el protagonista, aunque las ceremonias arrastran también un alto gasto en trajes para invitados e invitadas y de ceremonia en general.

“Después de estos dos años difíciles de la pandemia, ha vuelto la ilusión por disfrutar y por celebrar. Hay días, ahora, en los que incluso nos llegan varias clientas sin cita previa, cuando es fundamental dedicar tiempo y un trato personalizado con cada novia o invitada”, explica Carmen Cid Miranda, una de las más reconocidas profesionales, junto con su hija de Tania, del sector de eventos y ceremonias, a través de Alma Wedding.

Afirma que “apostamos por la moda española, con trajes incluso a medida, todo tipo de complementos, también zapatos, y el gasto medio en Ourense en un traje de novia, oscila entre los 800 a los 3.000 euros. Cada novia tiene claro lo que quiere, unas ir de princesas, otras vestidos románticos y también trajes para una boda más libre en la playa. En la mayoría de los casos finalmente deciden llevarse lo que les gusta, aunque se salga algo de su presupuesto”, explica.

Fueron tiempos difíciles para un sector que había realizado una fuerte inversión para las ceremonias del 2020, y todo quedó en almacén a causa del COVID. Ahora el repunte es ya más que visible, pues las ceremonias mueven decenas de sectores, desde la imprenta que imprime las invitaciones, floristerías y los proveedores de productos para abastecer los menús de esas boda, de nuevo numerosas, y a menudo pantagruélicas, porque esto es Galicia.

José Pérez Domínguez, deán de la Catedral de Ourense. Iñaki Osorio

"Muchas parejas nos piden casarse en la Catedral"

Ni la catedral de San Martiño se salva de este repunte de ceremonias, en este caso de parejas que, en un regreso a las ceremonias distintas y con mucho simbolismo, quieren casarse en el altar mayor de la seo para, de este modo, poder hacer la entrada y salida triunfal por las escalinatas principales y bajo el Pórtico del Paraíso, réplica del Pórtico la Gloria de Santiago. 

Así lo explica José Pérez Domínguez, deán de la catedral de Ourense. “La mayoría de las bodas que tenemos apalabradas, más que otros años, nos piden que sean en el altar mayor, pero estamos en plenas obras de restauración, la catedral está con andamios y cualquier ceremonia quedaría solapada, por lo que hemos pedido a la empresa que intenten apurar y rematar esas obras en junio. Eso también ayudará a que el visitante pueda disfrutar de todo lo que ofrece la catedral.

Para casarse en la seo ourensana “hay que abonar un emolumento, porque según el Código de Derecho Canónigo, cada pareja debe celebrar estas ceremonias en la parroquia a la que pertenece, y los que la solicitan suelen ser de otras parroquias de la diócesis; pero no es nada significativo y prefieren pagar y casarse en la catedral”, indica el deán.

Compartir el artículo

stats