Un hombre de 39 años aceptó ayer, en el juzgado de lo Penal 2 de Ourense, una condena de 6 meses de prisión más una multa de 120 euros, por agredir a un guardia civil que, en noviembre de 2021, le ordenó que se identificara por no usar la mascarilla en un bar de Viana do Bolo. Este encausado ya había sido condenado en noviembre de 2015 como autor de un delito de lesiones.

Sobre las 16.15 horas del 13 de noviembre de 2011, una patrulla de la Guardia Civil acudió a un local hostelero de Viana do Bolo para controlar el cumplimiento de las medidas contra el COVID que estaban vigentes entonces. Cuando los agentes requirieron al acusado que se identificara, porque estaba incumpliendo la obligatoriedad de llevar la mascarilla, lejos de identificarse y de colaborar actuó con “un total desprecio a la autoridad”, tal y como se considera como hecho probado con el acuerdo de conformidad. El acusado insultó a los guardias, llegando a propinar unas patadas y agarrando a uno de ellos.

Como consecuencia de los hechos, el agente sufrió una contusión en un dedo y en una pierna. Durante dos días, el guardia no pudo desempeñar sus funciones habituales. Los hechos por los que el encausado ha sido condenado, con su conformidad, son constitutivos de un delito de atentado y un delito leve de lesiones. El agresor debe indemnizar al guardia civil con 280 euros, por las contusiones causadas, en concepto de responsabilidad civil.