Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ourense se vacía a un ritmo de 180 habitantes menos al mes y cae por debajo de los 305.000

En los últimos cuarenta años ha perdido casi un tercio de la población, 124.000 vecinos. La longevidad aumenta: el número actual de centenarios triplica al que había en 2002

Un perro en una aldea de Carballeda de Avia. Casas abandonadas en un pueblo a solo seis kilómetros de la ciudad. // BRAIS LORENZO

En los últimos cuarenta años, la provincia de Ourense ha perdido una población más o menos equivalente a la que tiene en la actualidad el área metropolitana de la capital. A mediados de 1981 había 427.955 habitantes en este territorio gallego, el único que carece de salida al mar. Los datos provisionales sobre el número de residentes a fecha de 1 de julio de este año, publicados esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE), señalan una caída por debajo de los 305.000 habitantes.

En la provincia viven 304.068 personas, unos pocos miles más –en una extensión de 7.273 kilómetros cuadrados y 92 municipios– que en Vigo, la ciudad más poblada de Galicia (297.000). Un ourensano que haya cumplido 40 años en 2021 comparte ahora la provincia con cerca de 124.000 personas menos que cuando nació.

Una casa en ruinas en el pueblo abandonado de Barxelas, a solo seis kilómetros de la ciudad. BRAIS LORENZO

María Pilar Burillo, investigadora y analista demográfica, catalogó como una ‘demotanasia’ (demos significa población; Tánatos era el dios griego de la muerte no violenta) el proceso por el que la población se esfuma, de una manera progresiva y casi silenciosa, debido a la falta de políticas públicas o por su insuficiencia.

Con la pérdida de habitantes no solo se pone en duda el futuro de un territorio sino que, en cierto modo, se difumina el pasado, al desaparecer la memoria compartida, al resentirse la cultura de un lugar, aprendida con el tiempo. Y, entre tanto, es como si la sociedad y las administraciones se escudaran en una frase de Concepción Arenal: “Cuando la culpa es de todos, nadie tiene la culpa”.

En el número 3 de Barxelas hace tiempo que no vive nadie. BRAIS LORENZO

Desde hace medio siglo, la caída de población es constante. La herida demográfica sigue sangrando. De los 440.112 habitantes que tenía Ourense a mediados de 1971 se ha registrado un descenso continuado. En julio de 1981 había 427.955 residentes. En la década de los ochenta se produjo una primera despoblación intensa: en 1985 la provincia perdió la referencia de los 400.000 habitantes, finalizó 1988 con poco más de 375.000 y, a mediados de 1990, el censo había caído por debajo de los 360.000. En nueve años, la crisis demográfica causó entonces una reducción en el número de habitantes del 16%.

En el primer semestre de este año, el goteo ha continuado, situando la cifra de residentes por debajo de los 305.000, con la barrera psicológica de los 300.000 cada vez más cerca. A un día de que se inaugure la alta velocidad –el primer viaje comercial del AVE será este próximo martes–, la población de referencia en Ourense es de 304.068 personas. Es un 7,6% menos que hace una década (329.000 en julio de 2011).

Con la incógnita de si la conexión con Madrid a 2 horas y 15 minutos de distancia influirá de forma positiva en el censo y en la economía de la provincia, la realidad por el momento es de una media de 180 habitantes menos cada mes, 6 al día, tomando como referencia los 1.083 residentes perdidos en la primera mitad de 2021.

Un perro en una aldea de Carballeda de Avia. BRAIS LORENZO

Mientras el número total de habitantes no ha dejado de caer, la cifra de los más longevos aumenta con el paso del tiempo. Ourense, que presenta la edad media más elevada de toda España a la par que Zamora –51 años–, es una cuna de centenarios.

Según la estadística del INE, a fecha del pasado 1 de julio residían en la provincia un total de 241 personas con 100 años o más. En el mismo mes del año 2002 eran 84 los ourensanos con un siglo a sus espaldas. En 2012 se superó la cifra de los dos centenares de habitantes así de longevos y, de los últimos años, 2015 fue el año con más ourensanos de un siglo, casi 300.

Compartir el artículo

stats