La Asociación O Cimborrio cifra en 12 los establecimientos que ejercen la actividad sin control musical, que determina que son tres bares y nueve establecimientos de ocio nocturno. Desde el colectivo señalan que “a pesar de que se prometió hace dos años que se intensificaría el control de los sonómetros en los locales del casco histórico, la situación apenas ha cambiado y siguen apareciendo locales sin control acústico que sumados a los clausurados por clandestinos suman ya 26”. Y añaden que “nos llama la atención que el concello conceda la licencia pero no vele por su cumplimiento ya que no hace inspecciones periódicas, y cuando las hace, por las denuncias del vecindario, son pactadas de antemano con el supuesto infractor”.

O Cimborrio explica que tres informes acústicos en pubs de las calles Corregidor, Pizarro y Los Suaves desvelan que carecen de limitadores de potencia, ejerciendo sin ningún control acústico “ocasionando graves molestias al vecindario, en algunos casos con dramáticas consecuencias”. O Cimborrio aclara que “no se puede acreditar desde cuándo estaban infringiendo este castigo al no quedar rastro de los registros. Suponemos que habrá sanciones, pero la falta de transparencia en estos temas no permitirá conocer la cuantía que adivinamos ridícula ni si se llega a pagar”. Dicen que en Cabeza de Manzaneda hay cuatro locales que no cumplen con la legalidad, tres en la calle Luna, dos en el Corregidor, uno en Los Suaves, uno en Pizarro y otro en Pena Corneira.