Xosé Antón Dorrío Vázquez, asesor del alcalde de Ourense, profirió el sábado –desde su cuenta personal de Twitter– una serie de acusaciones que ayer alborotaron las redes sociales. Y es que, según él, algunos trabajadores del Concello podrían tener “caprichos pederastas”.
La afirmación del personal de confianza de Gonzalo Pérez Jácome se produjo cuando se enzarzó en una conversación, en dicha red social, en la que contestó a los tuits de otros usuarios. Estos se quejaban –con cierta retranca– de que el regidor trajese a la atleta olímpica Kalkidan Gezahegne a correr la San Martiño y de que hiciera “el ridículo” a nivel nacional con el asunto.
Al hilo de la palabra usada por uno de los críticos con esta idea del alcalde –que preguntaba cuanto le costaría a los ourensanos el “capricho” de Jácome– el asesor contestó que “para caprichos los caprichitos pederastas de algunos trabajadores del Concello”. Y acto seguido invitó a la Policía Nacional y la Guardia Civil a que investigaran el delito buscando “contenidos pederastas en cuentas oficiales del Concello”.
Ante estas declaraciones las respuestas no se hicieron esperar. Varios usuarios de Twitter le recriminaron que se esté ensuciando y poniendo en duda la labor de los funcionarios que trabajan en la Casa Consistorial de forma permanente. A lo que Dorrío respondió que en ningún momento había dicho que se tratase de un funcionario.
Tampoco daban crédito los que, ante la posibilidad de un delito semejante magnitud, la declaración se hiciese tan a la ligera en internet pero no se presentase con pruebas ante la Justicia. Algunos incluso se preguntaban cómo puede ser posible que tengan conocimiento de un delito de pederastia –en caso de ser cierto– y no lo hayan denunciado ya.
“Deberían pedirle explicaciones por conocer un caso de pederastia y no denunciarlo. Y al alcalde despedirlo ya”, espetaba otra persona.
El BNG pide que los hechos se denuncien en la Fiscalía y afea que se haga en redes sociales
El BNG considera que las acusaciones vertidas son de extrema gravedad. Así lo afirmó Luis Seara, portavoz de la formación nacionalista, nada más conocer el contenido de los mensajes que Dorrío escribió en su red social. “Hasta el momento el Gobierno municipal se caracterizó por insultar a los funcionarios y menoscabar su profesionalidad en reiteradas ocasiones. Pero esto es ir un paso más allá porque se trata de la acusación de un delito muy grave”, criticó el político de la oposición. En esta línea, Seara lamentó el comportamiento porque, dice, al no personalizar los hechos “menoscaba al conjunto de trabajadores y a la credibilidad de la propia institución, que ya estaba bastante en entredicho”. Así las cosas, desde el BNG de Ourense instan al asesor a que presente las pruebas que tenga por la vía legal. “Pedimos que con carácter inmediato la persona que hace la denuncia vaya a la Fiscalía y allí exponga todas las pruebas que tenga de ese presunto delito de pederastia. Pero esta no nos parece la forma porque puede provocar que los supuestos denunciados destruyan las pruebas”, finalizó.
