La Audiencia Provincial de Ourense juzga el próximo jueves a un informático acusado de un presunto delito de apropiación indebida y otro de estafa, hechos por los que la Fiscalía solicita una condena, en total, de un año y medio de prisión. Presuntamente, se quedó con material electrónico de la empresa en la que trabajaba, cuando se dio de baja de forma voluntaria –la cuantía se acerca a 2.500 euros–, y cambió el nombre de una cuenta de un programa de software por el de su nueva empresa, para operar con él sin tener que pagar su precio. Este programa permite crear redes virtuales y vincular los ordenadores particulares, a través de la nube, a una red de trabajo. Durante unos días, su antigua empresa no pudo dar servicio a sus clientes.