El PSOE exige al grupo de gobierno de Castrelo de Miño solucionar los problemas del arsénico del agua, con la construcción de una nueva estación de bombeo en el río Miño con carácter de urgencia, como viene reclamando desde hace años. Los socialistas señalan que el Concello publicó un bando en los últimos días en el que se hacían eco de que, debido a los altos niveles, los vecinos de Santo Estevo no podían emplear el agua, considerada no apta.

Los socialistas critican que, en lugar de impulsar la construcción de una captación de bombeo, se optó por pedir el préstamo para un filtro a la Diputación, que costó 48.000 euros y fue un “simple parche que demostró no ser efectivo para bajar los niveles de arsénico, ya que volvieron a descontrolarse”.