Un monte virgen de abedules

Montederramo presume de contar con un enclave natural con un gran atractivo para los amantes de la naturaleza. Se trata de un “bidueiral”, una masa grande de abedules y acebos en la parroquia de Gadín, que es un monte virgen que hasta ahora milagrosamente se ha salvado de los incendios forestales. Este espacio tiene una gran importancia ecológica, integrado en la Red Natura 2000, y es uno de los bosques de abedules con vegetación eurosiberiana situados más al sur de Europa.

El alcalde, Antonio Rodríguez Álvarez, explica que se trata de un monte comunal que está protegido y en el que nadie va a talar, por lo que se encuentra totalmente virgen. Hasta la fecha no se ha visto afectado por los incendios forestales a pesar de que “otros años ha estado cerca el fuego”. Explica que “donde hay especies autóctonas el fuego entra peor”, y a ello se suma “los medios que ponemos”.

Este espacio acogedor y verde se encuentra en la sierra de San Mamede y limita con los municipios de Maceda y Vilar de Barrio. El monte comunal de Gadín tiene una superficie aproximada de 1.000 hectáreas, de los que el Bidueiral ocupa más de 250. Según apunta el regidor, cada vez “crece más”.

Señala que destaca por ser una “zona preciosa”, que tiene una ruta por la que tanto turistas como vecinos van a caminar, haciendo un recorrido entre la naturaleza pura.

Repoblación de pinos

Pero este monte comunal en el municipio de Montederramo no solo cuenta con este peculiar bosque, sino también con otras especies, como los pinos. Antonio Rodríguez señala que se hacen las cortas cuando corresponde y también se está repoblando. Este monte de Gadín esta conveniado con la Xunta, que ejecuta trabajos de mantenimiento de pistas. La masa de abedules no necesita otros cuidados, solo protección –y suerte– ante los incendios.