La Asociación Vecinal de As Termas y la Asociación de Vecinos de Santa Ana do Pino llegaron a la conclusión de que quieren más información. Se reunieron con la edil de Urbanismo, Sonia Ogando (PP), y también con el delegado de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén (PP), pero no es suficiente. Una asamblea vecinal solicitó contactar con la Fundación Amancio Ortega, la entidad que financia el proyecto, para demandarles más información al respecto sobre un proyecto en el que no están claros los compromisos adquiridos por los representantes públicos.

Esas peticiones de los vecinos fueron una de las causas por las que los grupos de la oposición se abstuvieron en los dos plenos que se abordó un cambio de uso de la parcela, trámite fundamental para iniciar el proyecto.

Los dos colectivos vecinales buscan así que sus reivindicaciones sean atendidas. En concreto, un espacio verde para humanizar una zona ya de por sí saturada de carreteras y cemento.

Desde el BNG, quieren aclarar que “nosotros fuimos claro y todo el mundo sabe cuál es nuestro modelo y que para nosotros es irrenunciable la defensa de la gestión pública directa. Ya sabemos, y lamentablemente pudimos experimentarlo durante la pandemia, cual es el resultado del modelo privatizador que defiende el PP”. Y añaden que “no vamos asumir dos ediles de 27, la responsabilidad que nos quieren atribuir por no votar a favor del cambio de calificación”.