Ourense es, junto con Ceuta, la única ciudad española que no rinde tributo alguno en su toponimia al poeta granadino Federico García Lorca, pese a la vinculación que tuvo con Galicia el malogrado autor, con poemas incluso escritos en gallego.

Por este motivo el grupo municipal del PSdeG, defenderá en el pleno municipal de hoy, una moción para pedir que el Puente Nuevo de Ourense pase a a ser bautizado como Ponte de Federico García Lorca.

“Se trata de un agravio histórico que debemos corregir enseguida”, defendió la que defenderá de la iniciativa, la concejal Rosa Martínez, quien hizo hincapié en que García Lorca dejó “sobrada constancia de su amor por Galicia” a través de su aportación lírica a nuestra lengua con su breve poemario Seis Poemas Gallegos, obra por la que fue nominado por el pleno de la Real Academia Gallega para protagonizar el Día de las Letras Gallegas 2022.

Poeta vocacional en gallego

La edil socialista, junto con el presidente del grupo municipal Rafa Villarino, recordaron además la especial amistad que mantuvo Lorca con Blanco Amor, quien dejó dicho que el poeta granadino le había confesado que “cuándo dejara de ser poeta profesional en castellano, sería poeta vocacional en gallego”.

“Como ciudad capital de provincia, no podemos dejar pasar la oportunidad de reconocer el amor de Federico García Lorca por esta tierra y renombrar el Puente Nuevo, puesto que adolece de un nombre a la altura de tan singular estructura” defiende el PSOE que destaca la relevancia particular del enclave –inaugurado en 1918, coincidiendo con la publicación del primer poema del poeta en la revista Renovació fluencia de calles que llevan nombres de escritores e intelectuales gallegos como pueden ser Vicente Risco, José Ángel Valiente, Alfredo Brañas o Rosalía de Castro, entre otras”.

Por su parte, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Ourense, Rafa Villarino, puso de relieve que “ rebautizando el Puente Nuevo en honor a Lorca estaremos dándole una denominación definitiva la este puente que comunica también con el instituto en el que estaba su grano amigo, compañero y editor, Eduardo Blanco Amor” al tiempo que “cumplimos con la Xeración Nós y ponemos la cultura en valor en Ourense, algo cada día más necesario por la inacción de este Ayuntamiento”.

En la exposición de motivos de la iniciativa, los socialistas explican que mudando el nombre “obsoleto” de una ponte –llamada Nueva para diferenciarla del Puente Romano o Ponte Vieja– “estaremos evitando los posibles problemas y molestias que un cambio de dirección había podido ocasionar para el vecindario”, al tiempo que se se cumpla una “deuda histórica”.