El Espazo Xove de la ciudad (antigua Casa da Xuventude) habilitará desde este sábado un punto fijo en el que los ciudadanos podrán resolver trámites administrativos relacionados con el certificado COVID (de lunes a sábado) y hacerse test de antígenos (martes, jueves y sábados). En el caso de los distritos sanitarios de Verín y Valdeorras, estas gestiones se realizarán en los cribabús estacionados en la Plaza de García Barbón, en el caso de Verín, y en la Praza do Concello de O Barco.
La Consellería de Sanidade pondrá en marcha este servicio tras el éxito de la prueba piloto realizada el pasado sábado en las siete grandes ciudades gallegas, en las que se detectaron 68 positivos asintomáticos en 3.450 test. El objetivo es, precisamente, incentivar entre la población la realización de pruebas y aislar lo antes posible a las personas contagiadas que desconocen que tienen la infección. Además, y dada la demanda de certificados COVID y consultas relacionadas con este trámite, también se habilitará un puesto para imprimir certificados de la prueba diagnóstica negativa, de vacunación o de haber superado la enfermedad. También será posible activar la chave365 o tramitar un alta rápida en el sistema para personas con residencia fuera de Galicia.
El horario de atención en los tres puntos es de 12.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 20.00.
En el caso de las pruebas diagnósticas, será necesario autoinscribirse en la web del Sergas, en el apartado de cribados, donde se podrá elegir punto y horario. En cada uno de ellos trabajará un equipo formado por dos enfermeras, una TCAE y dos administrativos.
Además, las farmacias empezaron ayer a supervisar las pruebas por test de antígenos del colectivo entre 13 y 35 años, con comunicación de resultados al Sergas, por lo que, en caso de que sea negativo, los usuarios podrán disponer del certificado que les permite acceder a los establecimientos de hostelería en municipios con restricciones, como es el caso de la ciudad, y en locales de ocio nocturno.
En farmacias
El procedimiento es sencillo, explica el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Ourense, Santiago Leyes, ya que el farmacéutico solo tiene que verificar que la persona cumple los requisitos de edad y sanitarios para obtener la prueba gratuita y procesar la muestra, que el propio usuario se toma así mismo.
El problema, explica, es “la limitación de recursos”, ya que hay desabastecimiento. En esta sentido, señala que la adaptación a este sistema “será progresiva”, y que las farmacias adheridas serán las que marquen el ritmo en función de la disponibilidad de test, con la posibilidad incluso de programar una agenda.
Entretanto, la curva continúa en bajada en la provincia, con 2.209 casos activos ayer, 1.093 en la ciudad. La carga asistencia soporta un pequeño repunte, con 45 pacientes hospitalizados, tres de ellos en UCI.
