El abogado y ajedrecista cubano–residente en Ourense y con nacionalidad española– Arian González Pérez, que fue detenido el pasado lunes en la isla tras las manifestaciones pacíficas que se están produciendo por todo el país, declaró ante el juez en la mañana de ayer.

Desde el Colegio de Abogacía de Ourense –del que el arrestado es miembro desde el año 2020– señalan que, según han podido averiguar, se le imputa un posible delito de incitación a las masas al desorden público. Desconocen si se le ha dejado hablar con un letrado y las garantías procesales bajo las que se está dando la detención.

Por otro lado, desde el Liceo Academia Postal de ajedrez, con el que Arian colabora como docente, afirman que la familia les ha transmitido que ya ha declarado ante el magistrado y que ha sido enviado nuevamente a prisión a la espera del juicio. La familia también señala que cuando acude a competiciones, como gran maestro de ajedrez que es, lo hace bajo la bandera española y pide a la Embajada en la Habana que auxilie al joven que permanece retenido en la comisaría de policía del municipio de Camajuaní (ubicado en la provincia de Villa Clara).

El Liceo manifestó su preocupación ante la Embajada de Cuba en España por la situación del gran maestro que viene colaborando con la entidad cultural desde hace 5 años, desarrollando una labor docente en la escuela que esta institución tiene dedicada a los más jóvenes en la ciudad. Esperan, según transmiten en un comunicado, que “a la mayor brevedad posible pueda seguir desarrollando aquí su labor”.

Tanto la Federación Española de Ajedrez como el Consejo Superior de Deportes y el Consejo General de la Abogacía están realizando interlocuciones para clarificar la situación cuanto antes.

Regreso previsto

Arian González Pérez se graduó en Derecho en el mes de octubre de 2018 por la UNED, tras costearse los estudios con lo que ganaba enseñando ajedrez. Reside en Ourense desde el 2016, adonde llegó tras conocer a Joaquín Bello, del Liceo, en un campeonato de este deporte. Tenía previsto participar en un torneo internacional que se celebrará en Mondariz (Pontevedra) entre el 15 y el 22 de agosto.

El joven, de 32 años, se encontraba en la isla caribeña visitando a su madre, con problemas de salud y a la que quería traerse para Galicia. A los pocos días de llegar, y con el estallido social, fue arrestado por la policía cubana.

Desde el lunes no se sabía nada de su paradero, más allá de que lo habían detenido esa misma tarde.