Las clases terminaron hace un mes, pero los patios de algunos colegios siguen siendo el centro de los juegos de los más pequeños. Un total de 1680 alumnos de Infantil y Primaria disfrutan estos días de las actividades programadas por el Concello de Ourense para los meses de julio y agosto, enmarcadas en una iniciativa para facilitar la conciliación de aquellos padres que continúan trabajando y no tienen con quién dejar a sus hijos.

Diez centros de la capital sirven este verano para inculcar hábitos de vida saludables, actitudes solidarias y de convivencia, promover la igualdad de género, respetar el medio ambiente o reforzar contenidos de asignaturas como matemáticas, lengua e idiomas de un modo lúdico.

El Aula da Natureza, ubicada en Oira, también celebra actividades que se prolongarán hasta el mes de septiembre.