La justicia imprime un giro de guion a la política municipal de Ourense, siempre propicia a los terremotos: la causa por las supuestas donaciones forzosas de los asesores, que se sobreseyó en los últimos días de 2020 sin indicios de delito, resurge enfocada en las presuntas irregularidades en la gestión de los fondos de Democracia Ourensana (DO), el partido local que Gonzalo Pérez Jácome creó a principios del siglo XXI, llevándolo de la irrelevancia a la Alcaldía gracias al apoyo del PP.

Los tiempos de la justicia, que son propios, a veces producen paradojas: los populares se marcharon tras la denuncia de los ediles díscolos, hasta que Jácome aclarara aquellas sospechas sobre las entregas de dinero. Entonces se dictó el sobreseimiento y el PP tardaría meses en volver. Ahora, tras el reciente regreso de los populares a la coalición de Ourense, la magistrada acepta el recurso de reforma del edil Manuel Álvarez –exvicepresidente de DO– y del exasesor B. B., y señala la existencia de indicios “racionales” de un presunto delito de malversación de fondos públicos. No hay nadie imputado aún.

El alcalde reaccionó al revés judicial primero en sus redes sociales. Este fue el mensaje publicado en Facebook a mediodía: “El juzgado ha estimado un recurso contra el archivo provisional de enero 2021 [en concreto, fue acordado el 28 de diciembre de 2020], de las acusaciones vertidas contra mí en septiembre de 2020 por los tránsfugas. Eso significa que se seguirá indagando judicialmente. Esperamos que concluya en archivo, al no haber base, como siempre mantuvimos”, introduce el regidor.

Gonzalo Jácome, en una comparecencia reciente. // I. OSORIO

Gonzalo Jácome, en una comparecencia reciente. // I. OSORIO

“Aporté ingentes recursos”

“No le dimos mucha importancia en la primera denuncia y en el archivo posterior, y ahora tampoco se la damos, al margen de las alegrías provisionales que le cause a algunos ilusos, además en algo que no tiene nada que ver en mi gestión de alcalde. Por mi parte, ningún inconveniente en que se revise lo que proceda, y prestaré mi total colaboración para que no quede sombra de duda. Es irónico que tras haber aportado yo ingentes recursos de mi patrimonio personal hacia DO, alguien se plantee si realmente fue al revés. Todo se basa en testimonios vagos de quienes fueron expulsados del entorno de DO, y que solo guardan rencor y frustración. Lo único que me quita el sueño es la lucha diaria por sacar adelante a esta ciudad desde la alcaldía. Y lo estamos consiguiendo”, se explayó Gonzalo Jácome.

Cuarenta y cinco minutos más tarde, el Concello de Ourense distribuyó un audio en el que el regidor reiteraba su posición ante esta causa. “Por nuestra parte, pues vale, total colaboración y estamos totalmente de acuerdo en que se investigue y se mire con lupa todo lo que se tenga que mirar. Repetimos que no hay ninguna base en esta denuncia de gente del entorno de DO que intentó dar un golpe de estado en septiembre, le salió mal y su única aspiración que le queda ahora es intentar hacer daño, porque se basan en odio, venganza y rencor. Esta denuncia no va a ningún lado, no tiene ningún recorrido y esta apertura entendemos que tampoco va a llegar absolutamente a nada. Pueden investigar lo que quieran”, emplaza el alcalde.

“Indicios racionales y que se corroboran y complementan entre sí”

El auto que revoca el sobreseimiento de la causa es de la magistrada titular de Instrucción 3 de Ourense, Eva Armesto, y tiene fecha de 7 de julio, aunque fue notificado ayer a las partes. La jueza, que a finales de diciembre del pasado año decidió archivar en coincidencia con la Fiscalía la denuncia sobre las supuestas donaciones forzosas de parte de los sueldos y de las pagas extra, así como sobre la falta de transparencia en el manejo del dinero, –seis ediles críticos de DO denunciaron primero ante la Fiscalía, a finales de agosto de 2020, y el exasesor acudió directamente al juzgado, días después–, estima ahora el recurso que había formulado la abogada Beatriz Seijo, que representa al edil no adscrito Álvarez y al antiguo trabajador de confianza, en el ejercicio de la acusación particular.

“Dada la declaración de los testigos que relatan la observación en las cuentas de salidas de dinero con destino a cuentas personas de Gonzalo Pérez Jácome, la contratación de una persona para la realización de las mismas funciones para el Ayuntamiento, la Diputación y Jolper [el comercio de instrumentos musicales del alcalde], la confusión de patrimonios” que se observa según la declaración de un exasesor, “los requerimientos del Tribunal de Cuentas”, así como la manifestación del exeventual que denuncia y “declara que Gonzalo Pérez Jácome le dice que hay una deuda de Auria Televisión de 60.000 euros, para justificar las donaciones destinadas al partido político”, todo esto en su conjunto integra, según la magistrada, “indicios racionales y que se corroboran y complementan entre sí”.

"Se hacen constar cantidades cuya existencia no consta"

Además se añade, según la instructora, que “de las cuentas no resulta la justificación de los múltiples pagos efectuados, por cuanto contablemente se hacen constar cantidades cuya existencia no consta”. La jueza considera que los hechos pueden constituir un presunto delito de malversación, tipificado en el artículo 432 del Código Penal y concordantes.

Armesto ordena que se remita al Tribunal de Cuentas copia de la denuncia, de las declaraciones de los testigos ante la Policía Nacional, así como de la documental relacionada con las donaciones efectuadas a Jácome y supuestamente destinadas al partido. Al mismo tiempo, requiere al organismo de control un informe “en relación con la fiscalización de la actividad económico-financiera del partido Democracia Ourensana, entre el 3 de febrero de 2016 y 31 de diciembre de 2020, y la sujeción al principio de la legalidad” de las donaciones efectuadas por los asesores y concejales de Democracia Ourensana.

Contra el auto cabe recurso de apelación a la Audiencia Provincial. Mientras, la crisis de la tercera ciudad de Galicia en número de habitantes entra en un nuevo escenario.