El campo da Saleta de San Cristovo de Cea acogió ayer el bonito sonido de la gaita, para dar regreso a las competiciones de bandas por primera vez en la pandemia, con el XII Certame Celtibérico. Participaron unos 350 gaiteros de 19 agrupaciones procedentes de todas las provincias gallegas, así como de Asturias y Portugal. Alegraron la mañana a los cientos de personas que acudieron. Una afluencia que sorprendió a la organización, ya que superó la de ediciones anteriores. Las dos bandas del Concello de Xinzo de Limia, la A y la B, fueron las ganadoras del primer y del segundo grado.

El XII Certame Celtibérico de Bandas de Gaitas, Memorial “Muíño”, atrajo a 14 agrupaciones de la provincia de Ourense, 3 de A Coruña, Lugo y Pontevedra, una de Asturias y otra más de Portugal. Según el director de la Escola Provincial de Gaitas y de la Real Banda, Xosé Lois Foxo, las bandas participaron “con mucha ilusión y nivel”.

El campo de A Saleta acogió la competición. // FERNANDO CASANOVA

Entre las premiadas, en el tercer grado ganó la Asociación Cultural Carballo de Manteiga, de Lalín, Pontevedra, y en el cuarto grado, la agrupación portuguesa Sâo Tiago de Cardielos, de Viana do Castelo.

El programa de actividades de esta edición incluyó además la presentación del libro ‘Temperando la gaita gallega y su mundo’, de Fernando Molpeceres, así como la exposición de dieciséis cornamusas primitivas que estarán expuestas hasta el día 15 de agosto en el Multiusos de Cea. Hay piezas procedentes de Irán, Turquía, Túñez, Norte de África, Islas griegas o Italia.

Asimismo, se celebró el memorial a Xosé María Alfonso García Castro “Muíño”, un hombre que hizo un enorme servicio por la promoción de las bandas, por lo que ayer se le entregó la medalla de oro a su hija.

Y en Cea, tierra del pan, a falta de fiesta gastronómica por segundo verano, sí hubo un puesto para despachar este producto de indicación geográfica protegida.