La consolidación del segundo intento del gobierno bipartito PP-DO en el Concello de Ourense del presente mandato avanza y esta semana estarán ya los decretos con el nuevo reparto de delegación de responsabilidades por áreas del nuevo el equipo, integrado por los tres ediles del actual gobierno local de Democracia Ourensana, el partido del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome y los siete del grupo del PP que retoman el pacto. Serán 10 ediles de gobierno en una corporación de 27.
Pero Jácome, a preguntas ayer de los informadores, sobre los planes que tiene para la aprobación del Plan General de Ordenación Municipal (PXOM ) que recae en la Concejalía de Urbanismo, de nuevo en manos del PP, puso los puntos sobre las íes:“Aprobar el PXOM es una prioridad nuestra no del PP, y se tiene que aprobar por consenso de todos los partidos, nadie dijo que se vaya a hacer lo que diga el PP”.
Aviso para navegantes, de que el alcalde no va a “tragar” con todo, pues si bien el grupo popular ya lo había dejado encarrilado al pasado año, antes de romperse el bipartito, para llevarlo a aprobación inicial, el alcalde sigue insistiendo en que va a “pulir” dijo, determinadas edificabilidades y supuestos “pelotazos” del plan. Las torres de Copasa siguen siendo uno de los proyectos que tiene entre ceja y ceja, dice que rompería el “skyline” de la ciudad y al menos tratará de evitar o recortar una de ellas. La otra tiene licencia.
“Un PXOM con "xeito”
Fiel a esta nueva etapa en la que, por ahora parece optar por una dialéctica más fina –el PP ya le pidió respeto– afirma que lo que busca es “un PXOM con xeito”.
El PP se bajó de un tren en marcha y vuelve a subirse a un tren en marcha" dice el regidor
Por lo que respecta a la marcha, hace casi diez meses del PP del grupo de gobierno y su regreso ahora, para rescatar la ciudad de “la parálisis” , según indicaron, el alcalde les recuerda que “el PP se bajó de un tren que estaba en marcha y se sube a ahora de nuevo a un tren en marcha”, señala en relación a que el Concello no se ha parado pese a la situación de mínimos a la que se ha visto abocado por la ruptura del bipartito, y también por la compleja marcha de 4 de sus 7 concejales, que están ahora en el grupo de no adscritos.
Si el proceso burocrático sigue según lo previsto, en el próximo pleno ordinario convocado para el 2 de julio, ya se hará efectiva la reedición del bipartito.
