En pocos días, varias personas han notificado a la Policía Nacional que habían perdido el control de su plataforma de comunicaciones WhatsApp. En todos los casos, las víctimas afirman haber recibido un mensaje a través de esta herramienta, supuestamente desde el teléfono de un contacto suyo, en el que se le decía que por error le había enviado por SMS un código a su teléfono, y si se lo podía reenviar, que era algo urgente.
Al ser un mensaje de un contacto conocido, y sin pararse a pensarlo, la mayoría de las personas reenviaron el código recibido por SMS. A partir de ese momento, el WhatsApp dejaba de funcionar y ya no tenían acceso. El número de afectados “crece exponencialmente”, según la Policía, que aclara que la pérdida de control de la aplicación no implica que terceros puedan acceder a datos del móvil. Recomiendan reinstalar WhatsApp.
