La residencia San Carlos de Celanova se incorpora a la red asistencial de centros para personas mayores de la Fundación San Rosendo después de que ambos patronatos aprobasen la integración. Se confirma así la incorporación de la que ya advirtieron la semana pasada con recelo las asociaciones ADUR y Federación Vellez e Dignidade, que representan a familiares de usuarios de residencias gallegas. También el BNG ha mostrado su disconformidad con esta opción, reiterando su apuesta por un camino hacia la gestión pública de la residencia.

La Fundación San Rosendo, que ya el pasado fin de semana admitió que existían conversaciones entre ambos patronatos para llegar a este acuerdo, confirmó ayer la integración y destacó que este proceso dará continuidad al actual servicio “en las mismas condiciones que la residencia de Celanova lleva prestando desde hace más de 40 años”. En la actualidad, 58 personas mayores residen en este centro que es atendido por cerca de 30 profesionales.

La pandemia está en el trasfondo de esta negociación. San Carlos fue la primera residencia gallega en sufrir un brote de COVID-19 el pasado mes de marzo y tuvo que afrontar con serias dificultades la gestión de la crisis al quedar su plantilla diezmada por el efecto de los contagios. El centro se vio desbordado y fue necesaria la intervención de la UME y de la Xunta, que finalmente trasladó a los mayores contagiados a la residencia integrada de Baños de Molgas.

La integración confirmada ayer, explica la Fundación San Rosendo, “es fruto de una reflexión, tras las dificultades durante la gestión de la pandemia y la necesidad de abordar nuevos retos. Entre ellos, un mayor nivel de dependencia de las personas mayores, una atención más individualizada y una mayor dotación de recursos”.

En una reunión con los trabajadores, el presidente de San Rosendo, José Luis Gavela, destacó “la implicación y el esfuerzo de todo el equipo” durante aquellos momentos. En este sentido, indicó que la fundación mantendrá a “todo el equipo” y asumirá la dirección con profesionales procedentes de otros centros. De hecho, la actual directora había comunicado ya un período de excedencia que comienza este viernes.

Con esta incorporación, la Fundación San Rosendo cuenta con 72 centros que suman 3.768 plazas y 1.921 profesionales. El 89% de los centros están ubicados en el rural.