La Plaza Mayor y la calle adyacente de Doctor Marañón acogieron ayer la edición mensual del mercadillo de antigüedades, la segunda quita que se celebra tras varios meses de suspensión de esta feria por el COVID. En la jornada de ayer fue constante la presencia de público que se interesó por los más diversos objetos, libros, sellos monedas que ofrecen los expositores. La cita fue también una oferta de ocio más para los numerosos visitantes de paso que seguían por la mañana en la ciudad.